Brenda Micaela Gordillo fue asfixiada hasta morir por su novio, Naim Vera. Para intentar deshacerse del cadáver primero lo quemó en una parrilla y finalmente distribuyó sus restos en distintas zonas de la ciudad. Nuevos testimonios contra el femicida revelan el padecimiento que atravesó otra joven por su culpa: "Me da terror pensar qué me hubiese hecho a mí".
La fuerte declaración pertenece a Fernanda, una ex compañera de colegio del asesino. A través de sus redes sociales, tras enterarse del crimen de la joven catamarqueña, publicó que a raíz del sometimiento que le hizo vivir Vera tuvo que abandonar la escuela.
Además, la chica apuntó contra otro alumno con el que cursaba: "Mis compañeros, mis profesores y todos saben lo machistas que fueron conmigo; me denigraron, me decían puta delante de quien sea, me gritaban desde el auto en la calle", contó.
Fernanda actualmente vive en Australia, además de dejar el colegio, decidió irse de Catamarca: "No vivo ahí hace rato", explicó en otro tuit resaltando que se relaciona "con casi nadie" de la provincia. A raíz de la denuncia que hizo en su cuenta de Twitter, varios usuarios la cuestionaron. Ella respondió: "Nadie puede creer lo que hizo Naim Vera, pero yo sí, y ahora que asesinó a alguien pensé que era momento de hablar, se me pone la piel de gallina pensar que no le hubiese temblado la mano para hacerme algo a mí".
"No quiero ser víctima, ya pasó, ya está superado, quiero que sepan lo que es, no fue bullying, fue machismo", descargó Fernanda.
Brenda Gordillo tenía 25 años y murió asfixiada con un trapo en la boca. Sus restos fueron calcinados y distribuidos en distintas partes de la ciudad.