Al menú que se consume para las Fiestas de fin de año se suman el alcohol, el calor y otras reuniones extra a las noches de la celebración en sí, lo cual no es poca cosa para el estómago.
Además, los medicamentos post-cena circulan de mano en mano así como las descomposturas, por eso lo ideal es pensar en cuidarse un poco en estos días que quedan antes del 31 para evitar consecuencias indeseadas.
Optar por una dieta con alto contenido de líquido y alimentos frescos es la alternativa propuesta por los nutricionistas, así como cualquier artilugio para evitar sobrecargar el estómago.
“Hay que hacer una desintoxicación del organismo, en particular quienes han comido de más o tomado mucho alcohol”, dice la especialista Cecilia Llaver. Además, entre quienes lo tienen más indicado se cuentan los niños y los adultos mayores.
“Lo importante para estos días es sobre todo la hidratación: al menos un vaso de agua por hora que colabora en una buena desintoxicación del organismo”, sugiere la nutricionista Mónica Lizárraga.
Es un excelente momento para concentrarse en las frutas y verduras frescas, las gelatinas y las bebidas sin alcohol y preferentemente sin azúcar.
El áspic (frutas con gelatina) es una buena alternativa. Optar por las carnes blancas es otro de los aspectos que se destacan, ya que las otras tienen más contenido graso que es más difícil de digerir, mientras que los yogures preferentemente descremados también pueden ser un aliado.
Lizárraga también apunta que el ejercicio no debe estar ausente: “Por ejemplo si estamos en la casa, al menos media hora de caminata por día para lograr bajar los gramitos que se sumaron en Navidad”.
Por otra parte, hay que recordar el ya mentado “desayunar como un rey, almorzar como príncipe y cenar como un mendigo” que orienta en cuanto a la distribución de las comidas.
“Las noches son de mucho calor, nos movemos mucho y el estómago tiene una digestión más lenta por este tipo de comidas -apunta la nutricionista-. Se demora generalmente 3 horas en formar el bolo alimenticio y con estas dietas el proceso se hace más largo”.
Saber controlarse durante las Fiestas y después es la clave, ya que -según explicó- luego de dos días de comer mucho el cuerpo sigue pidiendo lo mismo.
Llaver, por su parte, opinó que “lo ideal es tratar de comer sano hasta la noche del 31 y con mucho líquido, especialmente los niños y mayores para no deshidratarse. Esa noche, evitar cremas, mayonesas, helados con mucha crema o que se corte la cadena de frío de los productos.
Es una época de mucho calor y estamos comiendo alimentos muy calóricos que no son adecuados para estas temperaturas. Entonces, es preferible estos días optar por un menú más sano siempre acompañado por ensalada y de postre preferir ensalada de frutas”.
La mesa del 31
Para las noches de festejo como la del 31 suele comprarse comida como para un regimiento. Por ello es bastante común que sobre y se siga comiendo el mismo menú los días subsiguientes.
Esta práctica es una de las más desaconsejadas porque, de esta manera, el sistema digestivo recibe una dieta generalmente muy calórica durante varios días para repetirlo a la semana siguiente. Pero además porque muchas cosas se descomponen.
La ruptura de la cadena de frío de muchos productos es algo bastante común con las temperaturas tan altas de diciembre y con la heladera generalmente abarrotada, lo que obliga a dejar muchas cosas fuera de ella. Se trata de otro de los aspectos que se sugiere cuidar para evitar gastroenteritis, en particular entre los más pequeños.
Además, hay que evitar calmar la sed con bebidas alcohólicas. En ese caso hay que preferir el agua y dejar para darse un gustito el otro tipo de ingesta; esto no sólo para evitar el exceso y sus consecuencias sino además porque el alcohol ralentiza el proceso de digestión.
Es que, junto al tipo de comidas propias de las Fiestas, es un combo con el que al aparato digestivo le resulta difícil lidiar.
Es en estos casos cuando aparecen luego acidez, gastritis, dolores abdominales y descomposturas que pueden arruinar una noche planeada para celebrar.
Qué se recomienda para los celíacos
El Ministerio de Salud emitió una serie de recomendaciones para que las personas con celiaquía y sus familiares disfruten las Fiestas de fin de año, y recordó que hay una lista de más de 6.600 productos libres de gluten para comer sano y rico.
Para evitar que un alimento libre de gluten se contamine con otros que sí lo contienen (contaminación cruzada), se recomienda:
- Las preparaciones sin gluten deben elaborarse y cocinarse antes que las demás.
- Los alimentos sin gluten deben guardarse separados de aquellos que lo contienen.
- Usar utensilios (tablas, cuchillos, tenedores, etc.) que estén perfectamente limpios para manipular alimentos sin gluten.
- Tener ciertos recipientes exclusivos para cocinar sin gluten.
- Nunca utilizar el aceite o el agua empleados para cocinar previamente alimentos con gluten.