De las 250 agencias de Quiniela que hay en Mendoza (un millar contando subagencias), unas 70 podrían estar involucradas en el presunto fraude de los premios sin reclamar que finalmente fueron cobrados.
Así lo informó la presidenta del Instituto de Juegos y Casino (IPJC), Josefina Canale, quien señaló que "no es posible aún" conocer cuáles son esas agencias, porque hasta ahora "sólo es una presunción".
Pero, además, porque “hay que preservar el buen nombre de los agencieros”, ya que hasta ahora “no hay indicios concretos de fraude”.
El hecho fue denunciado en febrero pasado ante Fiscalía de Estado, por el sindicato de empleados del Casino.
El dato de esas agencias surge de la investigación que realiza el propio instituto, que se intensificó luego de que interviniera la Fiscalía de Estado, adonde llegó la denuncia del gremio por "irregularidades en la carga del sistema de los premios no cobrados".
Autoridades y gremio coinciden en que el posible fraude pone en riesgo cerca de $ 500 mil mensuales, que entran como "ingresos extraordinarios" a las arcas del Estado, con los premios que nadie reclama y que podrían desviarse.
Canale informó que ellos comenzaron “en octubre del año pasado” con una auditoría interna sobre esta situación, y otra externa, “encomendada a la Facultad de Ciencias Económicas de la UNCuyo”.
En la auditoría interna se ha corroborado que “hay un promedio histórico de entre 1,5% y 2% mensual de tickets premiados no cobrados”, según Canale.
Pero al comparar el comportamiento de las agencias, se vio que algunas tienen un promedio “de entre 0,2% y 0,5%” de boletas premiadas no cobradas.
“Eso puede deberse a que efectivamente haya gente que no cobra; o que no entregan los tickets debidamente -algo que es una falta pero no constituye fraude- o está la posibilidad de que haya una maniobra fraudulenta”, señaló.
Dijo también que la investigación es “lenta y minuciosa”, porque hay que remontarse a la información de al menos 10 años atrás y. teniendo en cuenta que suele haber unos 5 mil tickets premiados por día, la cifra es apabullante.
Además, hay que buscar cuándo precisamente empezaron las irregularidades. Cabe destacar que la concesión con Ivisa, la empresa que hace la registración de estas boletas, comenzó en 1999.
Las autoridades del IPJC quisieron aclarar que “en ninguna gestión anterior se detectó el problema” y en su caso, no sólo se detectó “sino que se corrigió en 48 horas”.
Efectivamente, Canale destacó que cuando se descubrió la irregularidad, se solicitó de inmediato a Ivisa que corrigiera el problema. “Hoy está solucionado. Ahora resta saber qué pasó hasta ese momento, y desde cuándo”, indicó.
La denuncia
En febrero, en plena discusión paritaria, Martín Caín, titular del sindicato, pidió a Fiscalía de Estado que investigara la posible irregularidad del cobro de tickets premiados sin reclamo.
En realidad, lo hizo en base a la denuncia hecha al IPJC por un agenciero en octubre pasado, cuando -según las autoridades- empezó la investigación.
Fiscalía accedió a investigar el hecho, en conjunto con el organismo y hoy ambos entes se abocan a esa tarea, que incluso fue comunicada al Tribunal de Cuentas, tal como ese mismo organismo informó.
Si bien la denuncia de Caín pudo relacionarse con alguna chicana política, por estar en plena discusión paritaria, el gremialista ha dicho que lo que le interesa es “encontrar a los responsables”.
Desde la oposición, la jefa del bloque de senadores del PJ, Patricia Fadel, también pidió avanzar con la investigación, aunque desde su visión, el Gobierno "debería haber hecho pública en octubre" la irregularidad.
En el IPJC, en tanto, recuerdan que no sólo iniciaron la investigación administrativa, sino que además "se hizo una denuncia penal". Así lo explicó el gerente, Andrés Lombardi, que dijo además que el gremio, al hacer pública la denuncia, "más que favorecer está entorpeciendo el proceso investigativo", porque "ahora los posibles responsables ya están alertados".
Una "ventana" en el sistema de control
Según explican las autoridades del IPJC, en cada sorteo de Quiniela realizado se ingresa “por sistema” a la cuenta de cada agencia, se corrobora el monto de premios y se individualizan las apuestas premiadas.
Cabe recordar que cada ticket premiado sólo se puede cobrar en la agencia en la que se jugó. El ganador sólo tiene 15 días para reclamar el dinero ganado.
Las boletas tienen dos series de números de control. Uno de 8 dígitos que figura en los listados que emite el sistema para identificar las premiadas. El otro, de 16 dígitos, sólo aparece en la copia que posee el apostador. Así, el premio sólo puede descargarse del sistema en el momento en que el apostador presenta el comprobante.
Cuando los premios se pagan, la agencia oficial tiene 24 horas para enviar al IPJC la boleta que presentó el apostador. Ése será el comprobante de pago del premio.
La denuncia que un agenciero hizo en octubre de manera anónima indicaba que el sistema quedaba “abierto”, es decir, que se podía cobrar el premio sin contar con el ticket original (sin incorporar el segundo número de control). Ese cobro sucedía habitualmente el día del vencimiento del premio (día 15) y abarcaba “montos pequeños”.
Las sospechas entonces recaen en las agencias, pero nadie descarta que Ivisa pueda tener algún tipo de responsabilidad. O también el propio Instituto.