Las voces de repudio en contra de los atentados perpetrados en París (Francia) contra el semanario con tinte satírico Charlie Hebdo se replicaron en todas partes del mundo.
De hecho, en Mendoza los hechos de violencia que costaron la vida de 17 personas en tres ataques diferentes (vividos entre el miércoles 7 y el viernes 9) generaron dolor y preocupación. Justamente fueron los franceses que han elegido a nuestra provincia para vivir, quienes compartieron un mensaje centrado en la defensa de la libertad de expresión y la no violencia.
Sosteniendo su cartel representativo con la inscripción “Je suis Charlie”, los residentes mendocinos nacidos en Francia mostraron su pesar por estos hechos, en el marco de un acto en homenaje a las víctimas que se realizó el jueves en la sede de la Alianza Francesa, ubicada en calle Chile de Ciudad. Luego de cantar la famosa Marsellesa (el himno francés) y compartir un minuto de silencio, expresaron a Los Andes su punto de vista sobre lo ocurrido.
Hay que recordar que luego del primer asesinato de 12 personas en el conocido semanario, se produjeron en Francia tres hechos de violencia más en los días posteriores. El jueves 8 fueron atacadas tres mezquitas frecuentadas por musulmanes; luego se produjo un tiroteo contra policías en la comuna de Montroug -donde uno de ellos murió- y al día siguiente hubo una toma de rehenes en un comercio de la ciudad de Vincennes que costó la vida de 4 personas más.
En ese contexto y cuando los gestos de solidaridad se repitieron en diversos países, el cónsul de Francia en Mendoza, Philipe Rolet, se mostró dolido y al mismo tiempo agradecido por el apoyo recibido por parte de los mendocinos. “Vimos mucha solidaridad a nivel mundial y Mendoza no ha sido la excepción. Aquí se ha visto mucha solidaridad, inclusive a través de las redes sociales. Eso nos ha salvado el corazón”, expresó.
Al recordar la reacción de su pueblo tras los atentados, se mostró orgulloso: “Fue la mayor demostración de fraternidad de la historia de Francia. Nunca antes se habían reunido 3.700.000 personas en una concentración para rechazar la barbarie”, afirmó el representante de los franceses en nuestra provincia.
En la actualidad, se estima que viven aquí unos 500 inmigrantes de este país europeo. Gaël Martin (30) es uno de ellos. Contó a Los Andes que ni bien supo sobre lo que estaba ocurriendo en su país entró en shock.
Es que si hay algo que -según destaca- no acepta bajo ningún punto de vista es, justamente, la violencia. “Entiendo que una publicación no puede gustarle a todo el mundo pero nada justifica una matanza”, expresó el joven consciente de las temáticas que aborda Charlie Hebdo. Ahora, lo que más le preocupa es la situación de la violencia a nivel mundial.
Franck Poupard, director de la Alianza Francesa -entidad que organizó el acto del jueves en conjunto con el Foro de Periodismo Argentino- destacó que en Argentina se vivió la misma emoción que en otras partes del mundo. “Franceses y argentinos compartieron el mismo dolor y preocupación.
Muchos nos han llamado para transmitir su dolor, porque lo que pasó en Francia fue una tragedia que al mismo tiempo dejó al descubierto el nivel de unión entre los pueblos más allá de los credos”, dijo en referencia a las reacciones manifestadas tras los atentados.
Poupard afirmó que, de hecho, las actitudes de solidaridad han sido el motor que los ha animado a encontrar dentro de la tragedia, varios aspectos positivos. Francia, dijo, es un símbolo de la libertad de expresión, entendida como un derecho insoslayable.
Giuliana Mannarelén (62) es francesa y desde hace dos años vive en Mendoza. Aseguró que cuando vio las noticias sobre los atentados en su país sintió mucha tristeza.
“Me crié en Francia y crecí con la sátira. Recuerdo que compraba el semanario y lo leía”, dijo la mujer y coincidió en que dentro de la cultura europea Francia es un ejemplo de libertad de expresión y pensamiento. “Hemos necesitado dos siglos para obtener esos logros que son tan importantes para todos y muchas veces lo hemos pagado con sangre”, opinó y reforzó su defensa a la libertad de pensamiento y expresión.
Agregó que su país es un Estado laico, donde se respeta la diversidad. De hecho, aclaró, que en diferentes oportunidades la revista Charlie Hebdo se ha referido a los líderes de otros credos y sus seguidores, como el catolicismo y el judaísmo. “Esto es como si te tocaran el corazón”, deslizó conmovida.
Una postura similar compartieron Anne Laisney (39) y Philippe Subra (60), ambos franceses residentes en la provincia desde hace 5 y 17 años respectivamente. “Esto fue un atentado contra la libertad y por eso debemos estar presentes”, expresó Anne mientras sostenía en los brazos a sus dos pequeñas niñas, luego del acto en homenaje a las víctimas.
Por su parte, Subra expresó que por estos días tiene su corazón con los franceses. “Fue un acto muy grave que nos ha afectado a todos. Uno puede no estar de acuerdo con una publicación pero nada justifica los atentados”, agregó en sintonía con sus compatriotas.
