Hubo un agregado a la propuesta del Gobierno al SUTE para destrabar la negociación por el item zona. Pero no fue suficiente para vencer la desconfianza de los sindicalistas. La negociación se cayó, no habrá pago en los últimos días de diciembre o en enero de la deuda por ítem zona adeudado por el Estado a los docentes desde hace años. "Las partes quedaron liberadas" dijo el negociador oficial Ulpiano Suárez.
Así todo quedó en cero. Ahora el Gobierno evaluará las opciones que tiene para pagar la deuda y modificar el criterio que se viene aplicando para otorgar adicional de zona.
Si hay una palabra para definir el fracaso de la negociación es desconfianza. El SUTE se aferra al trabajo de la comisión mixta convocada en 2015 en un acuerdo entre el gobierno de Francisco Pérez y que está conformada por ocho miembros, cuatro por la DGE y cuatro por el gremio docente. Salir de ese ámbito en la que tienen alguna ingerencia es lo que no quieren.
Ayer el titular del SUTE decía al salir de la fallida paritaria que "el Gobierno volvió a traer una propuesta que ellos dicen integral, que para nosotros es extorsivo. Planteó una participación secundaria cuando lo que queremos es que la comisión tenga un papel protagónico".
Del otro lado, el Gobierno entiende que esa comisión es un fracaso, que trabaja poco y nada y que los criterios esgrimidos no son lo suficientemente técnicos como para incentivar la llegada de docentes a las escuelas "problemáticas"; en algún punto deslizan que lo poco que ha hecho esa comisión es darle zona a escuelas a las que no les hace falta.
El negociador del Gobierno, el subsecretario de Modernización Ulpiano Suárez decía que la propuesta del SUTE es "avanzar en una discusión dentro de un sistema que ya ha fracasado y no ha dado respuestas a esta problemática. Estamos en una provincia que tiene que hacer frente a deudas millonarias, generadas por gestiones ineficientes y que el sindicato ha sido corresponsable en ese desmanejo de esta problemática".
Henríquez se quejaba de quen la propuesta que llevó "el Gobierno que es prácticamente igual que la de ayer". Suárez indicaba que "contemplamos la participación de la comisión mixta, en una instancia de revisión con dictamen obligatorio"; traducido a lenguaje de los legos, individualmente cada docente podía impugnar lo que presentara la Dirección de Estadísticas e Investigaciones Económicas (DEIE) para recategorizar las escuelas en el otorgamiento de zonas y, además, la revisión de la comisión mixta que podría emitir un dictamen no vinculante.
Así las posturas encontradas entre SUTE y Gobierno, pusieron al pago de la deuda por el item zona impago en el limbo de los vericuetos estatales. Son 16 mil docentes los que podrían haber cobrado entre todos unos 700 millones de pesos adeudados por la errónea liquidación de ese adicional desde 2009.
El negociador oficial decía: "vamos a evaluar en el ámbito del Ejecutivo, para tomar la mejor decisión para los docentes y no docentes"; esto significa que se calcularán los pro y los contra de presentar un proyecto de ley para avanzar en el pago, sin intervención del sindicato.
Por lo pronto, SUTE y Gobierno volverán a verse las caras el 30 de noviembre para negociar otras cuestiones laborales no salariales: las continuidades de los docentes suplentes, las titularizaciones, la elección de los representantes gremiales ante las juntas.