El ejército de Estados Unidos divulgó la última imagen de una fotógrafa de guerra, quien captó su propia muerte hace casi cuatro años, cuando estalló accidentalmente un proyectil de mortero en Afganistán.
La foto de la especialista Hilda Clayton fue divulgada esta semana en la revista Military Review.
La publicación especializada destacó que la muerte de Clayton "simboliza cómo las mujeres del ejército cada vez están más expuestas a situaciones peligrosas de entrenamiento y combate, al igual que sus contrapartes masculinas".
Clayton, de 22 años de edad, tomó la foto el 2 de julio del 2013, durante un ejercicio de entrenamiento con munición en la provincia afgana de Laghman.
Otros cuatro soldados del Ejército Nacional Afgano también murieron a causa de la explosión. Uno de ellos era otro fotoperiodista con el que Clayton se había asociado para entrenar.
Clayton, de Augusta, Georgia, pertenecía a la 55th Signal Company, con sede en Fort Meade, Maryland.