Un poco de historia. El Cine Teatro Plaza (Colón 27, Godoy Cruz) se inauguró en 1946 y es la segunda sala más importante de Mendoza. Aunque el séptimo arte ya no es una de sus principales actividades, todavía guarda los dos grandes proyectores que se usaban antes de la era digital.
La sala de proyecciones... Atrás del nivel superior de butacas se ubica esta pequeña "fábrica de sueños", que está abierta para quien quiera visitarla. Aquí los proyectores, de casi dos metros de altura, duermen inactivos (aunque todavía funcionan). Ese rinconcito es, en definitiva...
Un museo. Porque también se pueden ver afiches antiguos, fotos, latas y más latas (algunas exhibidas, otras sueltas, otras archivadas). Ese espacio, largo y angosto, hoy lleva el nombre del propio Luis Cortés, quien desde ahí proyectó películas toda su vida.
La familia... Cortés padre falleció el año pasado, a los 75 años, pero hoy sigue en el teatro, como jefe, su propio hijo. El hermano de Luis padre también continuó el oficio, pero "adaptado" a la era digital: Carlos Cortés es el proyectorista del Cine Universidad.
La Foto
Reconocido
En agosto de 2015, Luis tuvo el homenaje de su vida: en el marco del Festival de Cine Mirada Oeste, se bautizó a la sala de proyección con su nombre. De sus 75 años, 62 los pasó en el cine. Recorrió también toda la Argentina (desde el límite con Río Negro hacia el norte), proyectando en todas las salas importantes y también en los cines de barrio de nuestra provincia. Trabajó para la Argentina Sono Film.
Analógicos de antología
En el tiempo del cine analógico, cada película venía en varias latas de película. Las más largas, como “Titanic” o “El señor de los anillos” (la última película que se proyectó así, según recuerda Luis) venían hasta en ¡diez latas! Durante cada función, los proyectores se iban alternando, pero de una forma en que no nos diéramos cuenta, claro...
Proyectores
A principio de los ‘70 se reemplazaron los viejos proyectores Gaumont por éstos, fabricados acá en Mendoza y con lámpara importada desde Estados Unidos.
Fotogramas
Cada segundo proyectado en la pantalla son 24 fotogramas en el rollo. En general son de 35 mm, el formato estándar, aunque se rodaron películas en formato 70 mm; es decir, un ángulo de visión más panorámico.
Otro paraíso
Lo que primero se ve cuando se entra a la sala es un afiche de “Cinema Paradiso”, el clásico de Giuseppe Tornatore. Aquí se cuenta la historia de un cine pequeño de pueblo y su operador, filtrada a través de los recuerdos de un niño, Totò. Entre Alfredo, el proyectorista del filme, y Luis Cortes padre habría muchos recuerdos compartidos. Y sí, por algo el cartel está allí...
En las paredes
Se pueden ver latas originales de películas como “Highlander II” (1991) y el documental “El maravilloso circo de Moscú” (1971). Entre los afiches está el de la popular película “El Club del Clan”, de 1964.
El corazón de la máquina
La luz que proyecta la lámpara surge, en el interior de la caja, del contacto entre dos electrodos de carbón, que se gastaban en general en el transcurso de una película y que hoy son, además, difíciles de conseguir.