El nombre... Guillermo Rigattieri nació en San Rafael, en1976. A los 18 años se trasladó a la capital mendocina para ingresar a la facultad de Arte. Luego decidió iniciar una búsqueda más personal trabajando en su propio taller.
Salto a la fama...Su talento para trabajar el metal con sensibilidad y para forjar un ideario fantástico le ha valido varios reconocimientos y menciones, entre ellos, el 1° premio Salón Vendimia 2004 Mendoza.
De viaje... Muchas de sus obras ya forman parte de colecciones privadas de España, Italia, Chile, Alemania, México, Suiza, Brasil y África. Ahora, por segunda vez, sus creaciones se exponen en Missouri.
Corazón de latón... "El acto mágico de traducir la idea en forma, de hacer visible lo invisible, eso es la escultura para mí", dice el hombre que convive, en plena Ciudad, con sus metálicos y tiernos personajes.
La Foto
Héroes retro
Los muñecos de He-Man (la serie de dibujos animados de los ‘80s), son testigos de su afán por las series y, además, de su perfil musical, el de bajista. En uno de los rincones de su sala de ensayo, Skeletor, Heman y Buttle Cat (más un retrato suyo pintado por su amigo Fernando Rosas) , presencian los ensayos de Maguu, la banda en la que Rigattieri empuña el bajo y para la cual realiza el arte de tapa.
Golpe a golpe
El búnker de Rigattieri tiene el encanto medieval del taller de uno de sus maestros, Roberto Rosas. Entre la soldadora, la amoladora , la guillotina, las pinzas y el yunque, sobresalen los martillos bola, creados por él mismo, para moldear los detalles de sus figuras. Por estos días, está trabajando sobre el cuerpo de un esquimal,su próxima obra, con destellos que remiten a la ciencia ficción.
La lección
”Mi hijo es una constante inspiración”, subraya. Así, cuando Ulises (de 5 años) temía meterse en la bañera culpa de una película de terror, el padre bocetó “Pequeñas conquistas”, una pieza donde el niño, satisfecho, se alza sobre el monstruo del baño. La escultura, que compone la muestra de su galería privada, le recuerda a Ulises ese triunfo.
Exoesqueletos
Las primeras incursiones en el lenguaje escultórico las hizo por medio de materiales plásticos como la arcilla y el látex. Más seguro en el idioma de las formas, Rigattieri descubrió el metal forjado y soldado que le proporcionó la inmediatez de los materiales directos, aprovechando las posibilidades expresivas del mismo.
Aquí tenemos a “Pantalón Mecánico”, uno de los personajes que habitan la entrada de su taller.
Jardín de esculturas
Junto a un santo encontrado en el patio de su amigo, el artista Gabriel Fernández, Guillermo ha colocado su “Carroza con niños”, una de las tantas obras que decoran su espacio verde. “Debajo, hibernan los sapos”, aclara ese niño alto que también ha construido una fuente para ellos.
