Uno de los pilotos más excéntricos que tiene el Paddock de la Fórmula 1 y una vez más lo dejó a las claras, ya que señaló que salir de fiesta entre carrera y carrera lo ayudó para ser un mejor piloto.
El finlandés manifestó que tomar entre carreras puede aumentar su rendimiento y recuerda que así se lo enseñó su preparador físico cuando se entrenaba junto él en Austria como preparación a su debut con Sauber en 2001.
Josef Leberer le propuso un día, tras algunos entrenamientos, comer una pizza y tomar una cerveza juntos. En un tono bastante tímido, Kimi le preguntó si podía permitirse cortar la dietay, sobre todo, beber alcohol, a lo que su entrenador le contestó "por supuesto, trabajas mucho, tomarse una pequeña cerveza no supone ningún problema".
Esa anécdota la guardó Raikkonen durante toda su vida. Además, para él, más allá de una broma, se convirtió en una filosofía de vida.
“Fue una broma habitual, pero en realidad pienso que es más una verdad que una broma, ya que piloto mejor si hago lo que quiero entre carreras que si no me lo paso bien, bebo y esas cosas", manifestó Raikkonen en 'Beyond the grid', el podcast oficial de la F1.
Cabe destacar que el ex piloto de Ferrari reconoció, en su libro, que en 2013 se pasó 16 días de fiesta. Pero, su inconveniente con el alcohol vienes del pasado, ya que durante el servicio militar le castigaron con 20 días de confinamiento por tomar y por su mala disciplina.
"Hay muchas teorías que lo demuestran, pilotas mejor después de habértelo pasado bien. El verano de 2013 se basó más o menos en competir y salir de fiesta. No es nada nuevo, para mí es lo normal", señaló
Y cerró: "Para los demás, quizás suene un poco raro, pero para mí antes era normal. Siempre pensé que te hace relajarte más, necesitas esforzarte y concentrarte más en la pista porque estás algo inseguro y al final, el resultado final es mejor".
