El ministro de Economía, Hernán Lorenzino, manifestó hoy su esperanza en que el Gobierno podrá convencer a la Corte Suprema de Estados Unidos y a los holdouts de que "la única solución" es pasar al 100 por ciento de la deuda argentina reestructurada.
Al presentar el Presupuesto 2014, en la Cámara de Diputados, Lorenzino dijo que "esperamos poder convencer a las Cortes, y a los acreedores que no participaron del canje del 2005 y del 2010, que la única solución es pasar del 93 al 100 de la deuda reestructurada en términos equitativos".
La Corte Suprema de los Estados Unidos anunció el miércoles que incluyó en la Conferencia del 30 de septiembre la apelación que la Argentina elevó sobre el fallo del 26 de octubre de 2012 que ratificó la decisión del juez Thomas Griesa que Argentina violó la cláusula de "pari passu" (igual tratamiento de acreedores).
No obstante, cualquiera sea la decisión que adopte la Corte Suprema de los Estados Unidos seguirá vigente el "stay" que mantiene frenada la orden de pago de 1.330 millones de dólares a holdouts y que fue dictada por la propia Corte de Apelaciones de Nueva York.
En otro orden, el Gobierno nacional pagó hoy 2070 millones de dólares correspondientes a capital e intereses del BONAR VII, utilizando reservas del Banco Central que de este modo quedarán en el límite de los 35 mil millones de dólares.
Este resulta la obligación más importante que afrontará la administración de Cristina Fernández en el último cuatrimestre del año, ya que este año no se pagará en diciembre el cupón atado al crecimiento.
El BONAR VII es uno de los títulos que los inversores eligieron para dolarizar sus inversiones, ya que se podían comprar en pesos y el pago se realiza en dólares billete en la cuenta comitente y son de libre disponibilidad. En consecuencia fueron utilizados como "arbitraje" con el dólar billete y en las últimas ruedas su cotización se ubicó entorno a los 9,2 pesos.
Los títulos fueron emitidos con legislación local y no se vinculan con el juicio enfrenta a la Argentina con holdouts en los estrados de Estados Unidos.
No obstante, el Gobierno utilizó este pago como argumento para destacar la voluntad de pago del país, de cara al litigio que se mantiene en los tribunales estadounidenses.
En la noche del miércoles, el Congreso Nacional convirtió en ley la reapertura del canje de deuda, bajo las mismas condiciones ofrecidas en 2005 y 2010, con la única novedad que quedó habilitado "sine die".