¿Por qué eligió Flavio Mendoza a nuestra provincia para que su compañía instale la carpa aquí para hacer temporada de verano? "Porque a los mendocinos les gusta mucho el circo", considera el artista en una visita fugaz en la que se permitió con Estilo recordar su infancia, volver con la memoria a sus orígenes, honrar esos sacrificios artísticos familiares, confesar sus ganas de actuar en una Vendimia y mostrar orgulloso sus ojeras producto de los insomnios paternales.
Sin su pequeño bebé Dionisio, Flavio viajó a Mendoza para anunciar este proyecto veraniego que lo tiene muy entusiasmado. Se trata de "El circo del ánima", espectáculo creado por él y producido junto a sus tíos, como en las viejas épocas. Porque las carpas fueron su techo de infancia, con padres "cirqueros" y una familia que supo transmitirle ese amor por este arte milenario.
Por más que este show montado en pleno siglo XXI cuente con gran despliegue tecnológico y una carpa 360° innovadora, Flavio anticipa que mantiene el espíritu de los circos tradicionales. De ahí que dedique esta producción a la memoria de sus padres. "Este espectáculo está dedicado a mis viejos y a mis abuelos, ellos fueron mi gran escuela en el arte. Ellos sí que fueron cirqueros sacrificados, en esa época donde si soplaba viento fuerte se te volaba la carpa. Me acuerdo que una vez, yo era muy chico, como no venía nadie a las funciones, mi papá anunció: 'Circo calefaccionado'. Había comprado unos tachos de 200 litros y allí había prendido carbón. La verdad que estaba un poco más calentita la carpa, pero arriba era un humo terrible, ¡pobre los acróbatas!", rememora en una charla íntima con Estilo.
"El circo del ánima", estrenado hace unos meses en Buenos Aires, recalará en el predio ubicado en Acceso Sur y Lamadrid, de Guaymallén, a partir del 20 de diciembre y durante tres meses hasta el 20 de marzo de 2020 ofrecerá funciones diarias de martes a domingos, con entradas de $800 a $1500 aproximadamente.
La carpa suspendida, montada en formato 360°, significa "una especie de circo colgante, el primero en América, sólo existe este tipo de montajes en Europa; se trata de un gran arco que posibilita una visión en 360 grados, con escenarios giratorios y toda la parafernalia que conocen de mis producciones", anuncia el director y productor del show.
Más de un centenar de personas mueve este circo de Flavio Mendoza, cuyo montaje llevará 10 días y que no contará con figuras rutilantes entre el elenco de 32 artistas nacionales e internacionales y una banda de músicos en vivo. "Voy a venir a las primeras funciones para dar el empujoncito a los chicos, aparte porque quiero actuar en este circo en Mendoza y traer a mi hijo para que lo conozcan", anticipa el coreógrafo que a sus 44 años puede sentenciar que "este circo es el broche de oro a mi carrera".
Flavio admite que logró destacarse en el mundo del espectáculo gracias a sus orígenes circenses. "Si no hubiera sido por el circo, hoy sería un bailarín más del montón", asume quien "la luchó" de abajo para ser lo que es. "Nunca busqué ser famoso, esto es un trabajo como cualquier otro; invierto mucho en tiempo y dinero para concretar mis sueños, como con este circo. Y me da alegría poder ofrecer trabajo digno a tantos artistas", se sincera el jurado de "ShowMatch" que lleva en su vida dos frases de cabecera. Una que le dijo Cacho Castaña, "la fama y el dinero no te cambian, te delatan", y otra que en su infancia un integrante del circo le repetía, "podés ser lo que quieras porque los únicos sueños que no se cumplen son aquellos que no se sueñan". En honor a esa persona, de nombre Dionisio, es que eligió bautizar a su hijo.
El arte circense: evolución y tradición en equilibrio
"El circo del ánima" se caracteriza por la sensibilidad de sus artistas, en plenitud todos con la danza, la acrobacia y la interpretación escénica. Así lo adelanta su director, Flavio Mendoza. "En comparación, 'Stravaganza' tenía más baile que acrobacia, acá no", diferencia el artista y sentencia: "Los circos han evolucionado y este no tiene nada que envidiarle al Cirque du Soleil".
El espectáculo, en poco tiempo en cartelera porteña, logró tal repercusión que Flavio anuncia: "Hasta de Qatar me lo han pedido para el año que viene, a mí me gustaría primero que gire por nuestro país".
Inspirado en su viaje a la India, "El circo del ánima" tiene mucho de esa cultura y su aprendizaje en aquel país. "Me encontré con algo muy diferente a lo que pensaba que era la India, mucha pobreza y sin embargo tienen una energía divina, viven con optimismo. La experiencia cambió mi forma de pensar en varios sentidos de la vida", explicó y el título de su obra está basado en el significado de Mahatma: alma grande.
"El final del show tiene un mensaje muy lindo, personal y para mi hijo, porque este circo tiene mucho de mis años de infancia, recorriendo pueblos, pegado a mi familia en la carpa, durmiendo en un colectivo convertido en tráiler donde mi papá a la madrugada prendía un rato las hornallas de la anafe para que no nos congeláramos", revela el creador de "Stravaganza", quien iniciará el año a pleno porque al tiempo de instalar su carpa en nuestra provincia hará temporada en Carlos Paz con la comedia "Un estreno o un velorio" junto a Georgina Barbarrosa y Betiana Blum.
Entre el musical, la comedia y el circo, Flavio -quinta generación de una familia circense- confirma: "El circo une diferentes generaciones y en la actualidad, como no hay tantos circos, los niños se acercan a este arte gracias a mi circo. Eso me encanta, eso no te lo da la comedia o el musical".
Quiere participar de una Vendimia
Un mes de audiciones le llevó al director la selección del elenco de "El circo del ánima" que, según sus palabras, fue ardua. "Sí, soy muy exigente, busco artistas completos y que me transmitan algo; podés ser perfecto técnicamente pero si tus movimientos no me emocionan, no sirve", sostiene quien hoy tiene dos escuelas de danza y acrobacia, las primeras de nuestro país dedicadas a la fusión de estos géneros. "Mendoza tiene muy buenos bailarines, yo tuve a varios, muchos se fueron al exterior", dice.
En esta línea, el artista entrerriano asume que ha visto varias fiestas de la Vendimia por tv. "Me parece el show más importante, más completo y espectacular de nuestro país. He copiado muchas cosas de la Vendimia para mis espectáculos", suelta con honestidad y, revela: "Es algo por cumplir: formar parte, estar en alguna de las fiestas de la Vendimia. Una vez lo intenté... Qué sé yo, es difícil, no se me ha dado. El intercambio de artistas de Buenos Aires con Mendoza, sea en propuestas porteñas o de acá, me resultaría muy enriquecedor". Y, él que sí ha participado en la Vendimia Gay, cierra: "Tienen una fiesta de la hostia, pura tradición y modernidad a la vez. Los felicito".
La confianza de los amigos
En esta charla distendida, y sin poses cuando el flash de la cámara se apaga, Flavio Mendoza remarca que puede volar alto con sus espectáculos gracias a su familia y amigos. "Son de fierro y estoy orgulloso de tenerlos, los cuido también porque junto a Dionisio son mis tesoros más preciados", define sobre personas que no forman parte de la vida pública, ni mucho menos mediática.
"Soy una persona trabajadora como muchas que he pasado por situaciones económicas muy difíciles. Una vez que pude comprarle una casa a mis padres y un departamento chiquito a mi hermana, recién ahí dejé de alquilar y me compré un techo para mí", cuenta. Y dice que la inversión económica en sus producciones las puede afrontar hoy gracias a ellos. "Una de las tantas crisis económicas de nuestro país me agarró con una deuda grande en temporada de verano, un amigo del alma estaba por comprar una propiedad y me dio la plata. 'Yo sé que me la vas a devolver, lo mío no es urgente, lo tuyo sí', me dijo. Y así fue, yo tenía que pagarle a los artistas, cancelar deudas. Al año le devolví todo y él se compró su departamento".
El amor...
Flavio no quiere ser un padre ausente, y ese objetivo le marca las ojeras. Orgulloso de llevarlas a un año y siete meses de la llegada de Dionisio a su vida. "Lo llevo al estudio, a los ensayos, a todos lados", cuenta y admite que su hijo es el hombre de su vida, que con o sin bebé siempre le costó encontrar pareja estable. "Quiero que quien esté conmigo esté con Flavio, no con el de la marquesina", confiesa.
Y en un salto al diván, el artista se sincera: "Tengo muchos TOC, soy insoportable en ciertas cuestiones que no logro resolver ni con tantos años de terapia". Hace alusión a sus obsesiones con la vestimenta, por ejemplo: "Soy muy Susanita, no puedo ver a una persona vestida sin combinar. Una vez, durante una función veía a un señor de la primera fila que tenía zapatos de vestir con medias blancas. No lo pude soportar hasta que en un momento se lo dije. Menos mal que su señora me apoyó y él se lo tomó a la risa".
En números
45.000 turistas por día estima Marcelo Reynoso, director del Emetur (Ente Turismo Mendoza) que recibirá la provincia durante este verano 2020.
1500 localidades tendrá en capacidad la carpa de Flavio Mendoza para ofrecer funciones de martes a domingos durante tres meses.
120 personas viajarán a Mendoza para hacer todo el verano 2020 "El circo del ánima", entre bailarines, acróbatas, intérpretes, músicos, técnicos, productores, vestuaristas, escenógrafos y otros.
150 cabezales móviles de luces de led serán dispuestos en una carpa suspendida por un arco de 50 metros de diámetro por 25 de alto.
180 grados de visión plena es lo que posibilita este tipo de montaje circense.
40 metros cuadrados de cortinas de led involucra "El circo del ánima".