Para Flavia Palmiero los años no pasan. Sigue igual que antes, pero no tiene la cara hinchada de bótox como muchas de sus contamporáneas ni se le nota ningún retoque.
Para celebrar hizo una producción en la revista Gente, en la que luce un cuerpo increíble.
"En vez de envejecer elegí madurar, que es muy diferente. Hay gente que es vieja a los 30 años. Madurar está buenísimo porque te da seguridad, tranquilidad y continúas lleno de energía. Aunque el tiempo pase, uno siempre tiene que apostar a la vida y a estar bien. Obviamente, si pudiera elegir volvería a cumplir cuarenta… No veinte, aunque fueron años bárbaros. Siempre digo que el paso del tiempo es inevitable; lo que sí es evitable es pasarla mal", afirmó en la entrevista.
Después admitió que su genética es privilegiada, y que su único cuidado es hacer 45 minutos de gimnasia a diario