Analiza alejarse, por lo menos en la próxima temporada. Los altos costos que manejan actualmente los equipos, de cara a 2015, son motivos suficientes para que piense en un obligado descanso después de diez años en Turismo Nacional.
Y si bien aún nada está dicho, ya que la pasión por el automovilismo es más fuerte, Julián Flamarique quiere cerrar el año de la mejor forma al mando del Chevrolet Cruze de Arana Ingeniería Sport.
Por lo menos ayer, en el autódromo de Olavarría, el godoicruceño demostró que quiere tener protagonismo en -quizás- su última carrera con la escuadra que integró a lo largo de doce fechas. En la tercera y última tanda de clasificación, nuestro crédito se metió séptimo con 1’39’’169 en su primer giro lanzado aunque no pudo mantenerse, por lo que resultó décimo.
“Salió una buena vuelta porque aproveché la goma en el momento justo. Luego fue imposible repetir porque hacía mucho calor y las cubiertas no aguantaron. Encima me fui arriba de un piano por querer mejorar”, declaró Julián que, a fin de cuentas, quedó noveno por la penalización a Guillermo D’Aguanno por exceder el límite de tiempo.
Para hoy, Flamarique reconoció que “me preocupa que el auto no tiene buen ritmo, por lo que tendré que apostar a cuidar tanto en la serie como en la final”. Con el Chivo estará moviendo desde el tercer cajón en la tercera batería.
También habló del futuro. “Sinceramente, todo sigue medio parado. Hablé con algunos equipos pero está difícil porque hace falta un presupuesto elevado y es imposible conseguirlo”, lanzó quien está decidido a ausentarse si la situación no cambia.
De seguir junto a Pablo Arana, sostuvo que “podría ser porque habrían cambios que favorecerían al Cruze, pero todo pasa por una cuestión económica”.
En Peugeot, la puerta se abre
El anuncio lo hizo el propio titular del Vittal G Racing Car. “Mariano Werner no sigue con nosotros en 2015”, tiró Gustavo Gatti cuando se lo consultó sobre su estructura, en la que ya están confirmados Facundo Chapur y Fabián Yannantuoni.
Ante el alejamiento del entrerriano, una gran chance nace para Julián Santero que, desde hace rato, suena en Clase 3. Es, junto con Guillermo Ortelli y ahora Hanna Abdallah, postulante a ocupar la butaca. “Está muy cerca de concretarse, aunque debo esperar la confirmación oficial”, manifestó.
Sobre Súper TC 2000, fue claro al decir que “todo sigue igual. Recién el próximo jueves tendré noticias de Chevrolet. Aprobaron una parte y falta que YPF lo haga”.