Este sábado, el fiscal Alejandro Cantaro y una empleada del poder judicial de Bahía Blanca fueron detenidos por violar el aislamiento social obligatorio dispuesto por el Gobierno nacional.
Ambas personas se trasladaban a bordo de un Peugeot 208 y según fuentes policiales, dichos funcionarios fueron interceptados por la Policía en pleno centro de Bahía Blanca. Cuando se les solicitó el permiso que acredita la necesidad de movilizarse en estos momentos, ninguno de ellos tenía la autorización que se requiere, según informó Radio Mitre.
A raíz de ello, los efectivos policiales verificaron sus antecedentes, confirmando que Cantaro se encuentra suspendido en sus funciones de fiscal, ya que en febrero se confirmó su procesamiento por encubrir a un sobrino que continúa prófugo. Según explicó el hombre, estaba llevando a López Camelo, hasta un cajero automático.
Según se supo, Alejandro Cantaro, jefe de los fiscales federales de Bahía Blanca, fue imputado en octubre de 2019. En aquel momento se lo acusó de proteger a "La Banda del Éxtasis".
Mientras la causa avanzaba, los magistrados consideraron que se había comprobado que Cantaro tenía conocimiento de las acciones de algunos integrantes de la banda. En febrero de este año, la Justicia lo suspendió por considerar que Cantaro utilizó su cargo para proteger a al grupo de narcotraficantes de esa ciudad.
Según las investigaciones, su sobrino Sebastián Gauna San Millán formaba parte de la misma, y el hombre habría permitido que eludieran a las fuerzas de seguridad fugándose en medio de una redada policial.