Federica Agüero tiene 41 años y es estudiante de Marketing Digital en la Universidad de Cuyo, pero además, es la orgullosa coordinadora de la asociación “Mujeres de la Viña”, un emprendimiento conformado por mujeres que buscan abrirse un camino en el mercado vitivinícola.
En un diálogo con Los Andes, Agüero se explayó sobre los inicios de este proyecto, que va creciendo a pasos agigantados y ya es todo un sueño hecho realidad.
“Mujeres de la viña nace en el año 2018, a través del proyecto Centro de Desarrollo Vitícola, (INTA-COVIAR), en esos años realizamos un diagnóstico donde mirábamos que había muchas mujeres productoras en la zona del Valle de Uco, que compartían las mismas necesidades, las mismas inquietudes, y sobre todo asesoramiento técnico sobre sus producciones”, contó la coordinadora.
Federica explicó que, en base a estas carencias que experimentaban las productoras decidió junto a su compañera de trabajo, Cintia Valverde, reunirlas y empezar a trabajar sobre sus fortalezas y debilidades. De esta manera, llevó a cabo una reunión de emprendedoras para solucionar y compartir muchos de los problemas que las agobiaban.
“En esa reunión, la primera, se descubrió que juntas podíamos poner en foco problemáticas como: el precio de la uva, el precio del tacho y las contingencias climáticas. También en ese año, las bodegas donde ellas vendían su materia prima ya no recibían su producción debido al sobrestock de vinos que tenían”, manifestó Agüero.
Surge así, en unas de las reuniones, la idea de empezar a capacitarlas para la elaboración de un vino que las identifique, según manifiesta la coordinadora, “un vino donde ellas vean reflejado el valor de su materia prima”.
Mujeres emprendedoras
La comunidad de emprendedoras está constituida por pequeñas productoras poseedoras de viñas de entre 1 y 20 hectáreas, en donde se producen uvas de alta calidad y, la mayoría, les vende sus producciones a bodegas extranjeras.
“Así comenzó nuestro sueño. Elaboramos 100 botellas con el asesoramiento del enólogo Pedro Villalba, para saber si el producto gustaba en la familia y amigos, el resultado de ese primer Syrah fue increíble, durante estos años la capacitación ha sido muy importante para el fortalecimiento del grupo”, explicó Federica.
Hoy la Asociación cuenta con una producción de más de 7000 botellas, y comercializan su vino, de producción artesanal, en todo el país.
“Estoy convencida de que, en unión, las mujeres podemos avanzar muy rápido cuando los objetivos son claros y posibles”, dijo la tunuyanina y añadió: “Hoy recibimos de parte del municipio de san Carlos, la adjudicación de un lote lo cual nos permitirá construir la bodega propia”.
Además, Federica se refirió a la reunión que se llevó a cabo este jueves por la mañana entre el intendente de San Carlos, Rolando Scanio, y Mujeres de la Viña. En esta reunión, el intendente les informó que les iba a adjudicar un lote para que puedan tener un espacio físico y así cimentar su propia bodega.
“Creo que es un hombre que no dudó en este proyecto, que confió en estas mujeres que día a día trabajan en un sector muy difícil por su competencia, con este gesto fortalece el trabajo asociativo. Es un lote ubicado en una zona industrial muy transitada por el turismo, solo me restan palabras de agradecimiento, contar con ese lote, nos llena de sueños y ganas”, señaló la estudiante de Marketing Digital.
Acerca del rol que cumple dentro de la comunidad de emprendedoras, Federica indicó que: “Soy la coordinadora, porque ellas lo decidieron y porque desde el primer día que las conocí supe escucharlas y potenciarlas, confío en ellas las admiro son mujeres increíbles. Hoy son 23 mujeres asociadas”.