Esta semana el Instituto de Desarrollo Rural de Mendoza publicó el avance de la superficie cultivada y efectivamente cosechada de la provincia con cultivos orgánicos. Si bien el resultado es similar al del año pasado, con un crecimiento apenas del 1%, lo cierto es que lentamente comienza avanzar este tipo de cultivos.
En otras ocasiones, en este mismo espacio hemos abordado cómo los mercados internacionales no pagan un diferencial por estos productos, pero termina convirtiéndose en una barrera de ingreso a la hora de presentarse en una góndola.
El reporte del IDR muestra que en la provincia hay unas 12.096 has cosechadas con productos orgánicos. Más del 80% de la superficie cultivada corresponde a cultivos industriales (uva con destino a Vino), luego aparecen las hortalizas, con un 10%, y los cereales, con 8%, entre los desarrollos más relevantes.
Sin embargo, el informe le pone foco a cómo estamos comparativamente a nivel nacional y allí sostiene que, comparado con Argentina, Mendoza es la provincia que participa con los mayores porcentajes a nivel nacional en los rubros cultivos industriales (27 %) y hortalizas (65 %).
“La hortaliza orgánica más cultivada en el año 2021 fue el ajo en la provincia de Mendoza. También podemos mencionar a esa provincia dentro de los cultivos hortícolas, zapallo, tomate, cebolla, verdeos, papa, zanahoria, remolacha, repollo, melón, brócoli, sandia, kale, hinojo, maíz”, destaca el IDR.
Ahora, es interesante plantear lo siguiente, a la luz de estos elementos se podría inferir que efectivamente los principales motores de las exportaciones de Mendoza de origen agrícola: vino y ajo, también son quienes están trabajando con desarrollo en el área orgánica de mayor dimensión. Aquí hay un dato interesante y es que esto habla sobre las inversiones que están haciendo. Según el IDR, mientras que a nivel nacional la superficie orgánica bajo seguimiento y el número de establecimientos en Argentina cayó, en nuestra provincia subió 16% y Mendoza pasó de 231 establecimientos en 2020 a 268 en 2021, siendo la provincia con más establecimientos agropecuarios con seguimiento orgánico (20%).
Al parecer hay un desarrollo firme en la provincia de esta clase de cultivos. Si bien es aún incipiente, podrían poner a Mendoza al frente del segmento.
