Para la agricultura de Mendoza, la helada es uno de los eventos climáticos de mayor preocupación. Si bien es menos “ruidoso” que el granizo, las bajas temperaturas suelen afectar a grandes franjas de producción y por eso cuando ocurre hace mucho más daño. De manera de poder analizar este fenómeno y comparar cómo ha sido desde 2018 a 2021, el Instituto de Desarrollo Rural (IDR) elaboró un mapa interactivo que se puede consultar vía web.
“La helada es uno de los eventos climáticos de mayor preocupación en la actividad agrícola de la provincia, debido a su gran potencial como generador de pérdidas económicas”, comentaron desde el IDR. Aclararon también que el nivel de daño en el cultivo depende de varios factores tales como: la vulnerabilidad de la especie o variedad a las bajas temperaturas, el estado fenológico del momento, la intensidad de la helada, el tiempo de exposición y la ubicación geográfica, entre otros.
Con respecto al mapa interactivo, lo que se hizo fue relacionar las temperaturas críticas observadas en los distintos Oasis productivos (DCC) con las especies cultivadas y el estado fenológico observado en ese momento por el Programa Fenología de Frutales del IDR.
Esta herramienta online permite elegir qué zona de influencia se analiza, ya sea Valle de Uco, Sur, Norte y Este. Además, se puede mostrar la ubicación de algunos cultivos: almendra, cereza, ciruela (para fresco o industria), manzana, pera, damasco y durazno (para fresco o industria). Mientras más se oscurece el color del mapa, menor fue la temperatura.
El lapso medido es desde la temporada 2018 hasta el 2021 con las especies afectadas y el estado fenológico observado en ese momento. Debe tenerse presente que el estado fenológico representado es el de mayor susceptibilidad a las temperaturas críticas de ese momento. Se puede acceder al mapa haciendo click aquí.
Denuncias en Contingencias Climáticas
A fines de marzo y principios de abril, se dio una situación inesperada con respecto a las heladas, ya que en zonas de Valle de Uco y el Sur de la provincia (y en menor medida en el este) registraron temperaturas de hasta -4,6 grados bajo cero. Eso obligó a acelerar la cosecha de las uvas que todavía estaban en la planta, ya que si bien el fruto no se daña y se puede consumir, la planta pierde fuerzas y se podría caer la producción al suelo.
El día 2 de abril la Dirección de Contingencias Climáticas (DCC) resolvió abrir un registro de denuncias por los daños que pudieron haber causado esas heladas tempranas registradas los días 30, 31 de marzo y 1 de abril. El objetivo era que los productores que no hubieran cosechado pudieran recibir los beneficios de la Ley de Emergencia Agropecuaria, y queda tiempo hasta el 19 de abril inclusive.
Según informaron desde la DCC en ese entonces, de acuerdo a los registros de sus estaciones meteorológicas, en esas fechas se verificaron temperaturas por debajo de los 0 grados centígrados en diferentes zonas rurales, que pudieron haber causado pérdidas en las producciones de hortalizas, vid y olivos. Las denuncias de pérdidas se deben hacer de manera presencial en las delegaciones de la DCC.
