La necesidad de avanzar hacia sistemas más ecológicos y eficientes de liberación de insectos estériles condujo a la incorporación de la técnica del adulto frío. A partir de la inauguración, en enero, del Centro de Distribución y Empaque de Adulto Frío, en General Alvear, se generó una vinculación estratégica y se expandió el programa mendocino de control de mosca del Mediterráneo más allá de los límites provinciales.
La técnica del adulto frío consiste en la eliminación de las tradicionales bolsas y todos los soportes de papel, y hace de este modo más sustentable un proceso de control de plagas por sí ecológico. Asimismo, la evaluación de los resultados, hasta el momento, muestra una elevada tasa de competitividad de los insectos liberados, derivada de las mejores condiciones que permiten reducir el estrés en los ejemplares liberados, así como una importante reducción en los costos operativos.
Los insectos producidos en la Bioplanta del Iscamen, en el departamento de Santa Rosa, son trasladados a General Alvear, donde culmina el proceso biológico en contenedores denominados “torres de emergencia”.
La incorporación de estas instalaciones y su tecnología ha permitido la nacionalización de las acciones de producción y liberación de insectos estériles producidos en Mendoza, ya que actualmente se desarrolla la liberación en todas la áreas libres de mosca del Mediterráneo patagónicas, como Neuquén, Roca, Cipolletti, Cinco Saltos, Centenario y Allen. Esto constituye una innovación en la protección de grandes áreas a nivel nacional y sudamericano.
A partir de los resultados alcanzados, se espera ampliar este esquema nacional incorporando nuevas áreas de liberación. En este sentido, semanas atrás, técnicos y profesionales del Ministerio de Producción de San Luis visitaron el Iscamen para reunirse con profesionales del programa de erradicación de la mosca del Mediterráneo de Mendoza. Los visitantes recorrieron laboratorios de identificación de insectos y la bioplanta de producción de moscas del Mediterráneo de Santa Rosa.