La policía de Toronto determinó que las muertes del millonario canadiense Barry Sherman, fundador del grupo farmacéutico Apotex, y su esposa a mediados de diciembre se trataron de un doble homicidio, informó la entidad el viernes al término de la investigación.
Tras seis semanas de pesquisas, "tenemos suficiente evidencia para determinar que se trata de una investigación por doble homicidio y que Barry y Honey Sherman eran de hecho el blanco" deliberado, dijo la inspectora Susan Gomes durante una conferencia de prensa.
Los cuerpos de los esposos fueron encontrados el 15 de diciembre en su casa en Toronto.
Gomes confirmó que la pareja fue estrangulada, pero declinó hablar de posibles sospechosos y se limitó a señalar: "Tenemos una extensa lista de personas que buscamos para conversar".
Barry, de 75 años, y Honey Sherman, de 70, "fueron encontrados muertos en el subsuelo donde está la piscina, colgados con un cinturón a una baranda de protección y en posición semisentados. Estaban usando sus ropas", declaró.
Los primeros elementos de la investigación, según indicó, permitían afirmar que los Sherman "fueron vistos vivos por última vez el miércoles por la noche", es decir dos días antes de que se descubrieran sus cuerpos.
No se encontraron pruebas de robo en la lujosa vivienda de la pareja en Toronto.
La policía compiló 127 declaraciones de testigos, revisó el barrio de la pareja en busca de pruebas y recolectó unas 2.000 horas de videos de cámaras de vigilancia de casas y negocios en la zona.
En 1974, Barry Sherman creó Apotex, dedicada a la fabricación de medicamentos genéricos y con más de 11.000 empleados en el mundo. Cuando murió se desempeñaba como presidente del consejo de administración de la compañía.
Inicialmente las autoridades consideraron que la muerte de los Sherman, cuya fortuna fue estimada en unos 3.800 millones de dólares, se trataba de un doble suicidio o de un asesinato seguido de un suicidio.