La mayoría de las personas a la hora de servirse un vaso de cerveza tienden a que se forme la menos cantidad de espuma posible sobre el final. Sin embargo, especialistas afirman que tomarla con un poco de espuma tiene sus beneficios.
Los que saben, afirman que la espuma es importante porque proporciona una cubierta natural que mantiene la carbonatación y conserva la frescura por más tiempo.
Adrián Curcio, considerado como el mejor tirador de cerveza en el Pint Craft Beer 2019, nos cuenta cuál es la forma ideal de servir una buena pinta. "La pinta ideal se sirve con espuma, esto tiene una razón química. La idea es que la espume evite el contacto directo del liquido con el aire y de esta forma no pierda gas tan rápido. Además se conservan mejor los aromas y sabores de la materia prima con que se realizo la bebida. Una pinta bien servida tiene que tener 2 dedos de espuma, esto además hace, que ese gas no se ingiera y vaya al organismo. De esta forma la cerveza no te hincha", explicó Adrian.
Como encargado de "Kallpa Bar"- ubicado en Arístides Villanueva- los protocolos de limpieza son muy importantes. "Las canillas deben estar bien limpias y nosotros higienizamos los productos todo el tiempo. La cerveza bien servida también depende de que los materiales se encuentren muy bien higienizados".
Otro aspecto importante a tener en cuenta para servir una buena pinta, son los vasos. "La cristalería es muy importante, los vasos deben estar bien limpios y si se puede fríos pero no congelados. Esto hará que la bebida conserve sus aromas y sabores y además sea más placentera su ingesta", agregó Adrián.
En resumen, la pinta ideal se sirve 2 a 3 centímetros y que sea fina y persistente de modo que se adhiera al vaso, lo que hará al producto más tentador y satisfactorio para su consumo.