Nanay y Tatay adoptaron a Jayvee Lazaro cuando solo tenía tres meses pese a encontrarse en el umbral de la pobreza y tener dos hijos más. Eran vendedores en la ciudad filipina de Bucaue y vivían junto a otros cinco familiares en una casa sin suministro de luz y agua. Sin embargo, según el propio Jayvee, esta situación "nunca fue un impedimento para vivir rodeado de amor".
Hoy, Jayvee Lazaro Badile II es un empresario de éxito que ha trabajado para varias multinacionales. Ha decidido recompensar el cariño y el esfuerzo que hicieron sus padres adoptivos regalándoles una gran casa de tres pisos y siete habitaciones, según Clarín.
Una publicación de Facebook se volvió viral. Allí Jayvee compartió un collage de fotos con sus padres adoptivos. "Cuando Nanay y Tatay me adoptaron, no llevábamos una buena vida. Nanay es vendedora, Tatay es porteador. Ahora que tengo la oportunidad de devolverles algo de lo que me han dado, me voy a asegurar de que vivan sus sueños, más de lo que podrían imaginar".
"Tenía 3 meses cuando Nanay y Tatay me adoptaron. La vida fue muy difícil. Tenía que estar trabajando como estudiante, y estábamos felices de que Na pudiera hacer 2 comidas al día. Además de eso, vivíamos en un apartamento de 20 metros cuadrados", explicó Jayvee en un post de Facebook. Esos sueños también pasan por viajar, así que la familia realizó hace poco un viaje a Australia, Nueva Zelanda y Dubai.
La nueva casa tiene 7 habitaciones y esta amueblaba con prácticamente todo lo que sus padres puedan necesitar. "Pagué la casa en efectivo y fue construida en un año. Tiene 7 habitaciones, y no trajimos nada del lugar anterior, excepto el televisor que compré para mi familia como regalo de Navidad antes", reconoció.
Por si fuera poco, Jayve se encarga de llevar a sus padres de viaje alrededor del mundo, para que disfruten de la vida. Además nunca duda en pasar todo el tiempo que puede demostrándoles el enorme amor y gratitud que siente al elegirlo para hacer parte de su familia.