Afectado po un cuadro de dengue, el arquero Tomás Figueroa -tercer guardameta de Vélez- se refirió a su enfermedad y al tratamiento que está realizando.
"Me dijeron que tenía dengue. El fin de semana me dolía todo y la fiebre no me bajaba. No puedo estar parado mucho tiempo", contó el golero en una entrevista con Radio La Red.
El guardameta se halla aislado del resto de sus compañeros y el cuerpo médico "fortinero" espera que se le pueda dar el alta durante la próxima semana.
"Pase un fin de semana muy malo, la fiebre no bajaba, llegué a 38 grados", dijo.