El expresidente de la federación venezolana de fútbol Rafael Esquivel, detenido en Suiza desde hace nueve meses, aceptó ser extraditado a Estados Unidos.
Esquivel fue arrestado en mayo en Zúrich como parte de la investigación de Estados Unidos sobre corrupción en el fútbol y que involucra a varios de los principales dirigentes del deporte en Sudamérica, incluyendo los tres últimos presidentes de la Conmebol.
Un vocero del ministerio de justicia de Suiza dijo que Esquivel decidió hoy retirar su última apelación en contra de la extradición, que estaba ante el máximo tribunal del país.
``Esto permitió que la Oficina Federal de Justicia aprobara el mismo día su extradición a Estados Unidos'', dijo Folco Galli a The Associated Press.
``Esquivel quedará bajo la custodia de policías de Estados Unidos y será llevado en los próximos diez días a Estados Unidos'', agregó. Indicó que no divulgarán el día y hora exactos de la extradición por motivos de seguridad y privacidad.
Esquivel apeló la solicitud de extradición ante el tribunal federal de Lausana el 27 de enero. La noticia sobre su decisión de retirar el recurso se produjo mientras los delegados de la FIFA votaban en Zúrich para elegir al sucesor de Joseph Blatter en la presidencia del organismo. También aprobaron un paquete de reformas para combatir la corrupción.
Las autoridades estadounidenses acusan a Esquivel de aceptar millones de dólares en sobornos relacionados con la venta de los derechos comerciales de la Copa América.
Esquivel es uno de los nueve dirigentes arrestados en dos redadas en Zúrich en mayo y diciembre del año pasado. Cinco hombres ya fueron extraditados a Estados Unidos, mientras que el séptimo, el uruguayo Eugenio Figueredo, fue enviado a su país para ser enjuiciado allí.
Otros dos todavía apelan sus extradiciones ante la justicia suiza.
