La propuesta de un grupo de trabajo de la FIFA de celebrar el Mundial 2022 de Catar del 26 de noviembre al 23 de diciembre de ese año divide al mundo del fútbol y sus principales detractores son los europeos.
La iniciativa de jugar el Mundial durante el invierno, el “período más viable” según la Federación Internacional, tiene el visto bueno de las seis confederaciones que forman el organismo, incluida la europea UEFA que mostró su “apoyo” a la recomendación, la propuesta choca de pleno con los intereses de las ligas y clubes europeos.
“Está claro que hay pros y contras para todos, pero ha salido una solución de esta discusión, y es la de noviembre-diciembre de 2022”, declaró en Doha el secretario general de la FIFA Jerome Valcke, consciente de que la propuesta no contentaría a todos.
Richard Scudamore, el jefe de la Premier League inglesa declaró estar “muy decepcionado” por una medida que perjudica los intereses de las ligas europeas (las más potentes del mundo) y de los clubes europeos, ”que son los que aportan la mayor cantidad de jugadores a esa Copa del Mundo”.
Scudamore criticó también la falta de apoyo de la UEFA, que con esas fechas se vería poco perjudicada en su competición faro: la Liga de Campeones. “La UEFA (...) nos ha fallado un poco”, se quejó.
La decisión final, no obstante, corresponderá al comité ejecutivo de la FIFA que se reunirá el 19 y 20 de marzo próximos en Zúrich.
Frederic Thiriez, presidente de la Asociación de ligas europeas de fútbol profesional (EPFL), estimó en una entrevista que se trataba de la “peor solución” para los campeonatos europeos.
“Yo todavía espero a la reunión del 19 de marzo. Después, si tenemos que tomar medidas, las tomaremos”, añadió.
El dirigente francés analizó la problemática de un Mundial en noviembre-diciembre: “Hay que imaginar lo que pasará en Francia, Alemania, España, Italia... Se va a detener esos campeonatos en noviembre, tras 13 o 14 jornadas. Se reanudarán dos meses más tarde, en enero. Durante ese tiempo, los jugadores (no convocados) no jugarán, los clubes no tendrán ingresos, los aficionados se verán privados de sus ligas nacionales y las televisiones se enojarán y pedirán indemnizaciones”.
Ligas europeas, perjudicadas
El presidente de la Liga de Fútbol Profesional española, Javier Tebas, mostró en un comunicado su oposición a un mundial en esas fechas porque "perturbará y causará un grave daño al normal desarrollo de las competiciones europeas" y reafirmó que el periodo menos conflictivo sería el mes de mayo.
Su homólogo alemán, Andreas Rettig, presidente de la DFL, criticó que el periodo recomendado representa un perjuicio “a nivel de organización y también financiero” para los campeonatos europeos.
Rettig también se preguntó sobre “qué impacto” tendrá en los jugadores que el torneo de 2022 tendrá cuatro días menos de duración que el Mundial de Brasil 2014, cuando el número de partidos será el mismo.
Hasta el presidente de la Federación Alemana (DFB) Wolfang Niersbach admitió que “será complicado hacerse a la idea de un Mundial justo antes de Navidad”, pero que el clima en Qatar no deja muchas opciones.
“Falta ahora encontrar las mejores soluciones para programarlo, algo que difícil, pero no imposible”, añadió.