Hacía diez años que Gimnasia y Esgrima no vencía al Deportivo Maipú en condición de visitante.
Desde aquel lejano 3 de marzo de 2006, cuando el encuentro que se disputó en el Malvinas Argentinas (con el Cruzado haciendo de anfitrión), se definió por la mínima diferencia. Fue el gol del ex Algarrobal, Rodolfo Carabajal, el que inclinó la balanza para los Mensanas.
Pasaron 11 partidos sin derrotas del Botellero hasta que anoche, al cumplirse la docena de partidos entre ambos dentro de este torneo, llegó el festejo del Lobo. Encima, para ratificar la supremacía en esta zona 3 del Federal A.
"Lechuga" feliz
El entrenador de Gimnasia, Darío Alaniz, se mostró muy conforme, como era de esperar. Luego de mucho tiempo, Gimnasia vencía como visitante al Cruzado y esto fue, según el DT, porque su equipo “tuvo personalidad, la que uno pretende día a día. Estoy feliz porque se lo merecen. Fuimos ordenados y contundentes para lograr lo que vinimos a buscar”.
Alaniz ponderó también las virtudes de su rival: “Sabíamos que veníamos a un reducto difícil, a enfrentar a un rival con muy buenas individualidades, y hoy (por ayer) el equipo demostró una personalidad tremenda. Eso pedimos en la charla técnica y es lo que nos dieron en la cancha”.
La punta de la zona es exclusividad del Lobo, pero Alaniz no se la cree: “Momentáneamente demostramos que somos los mejores de la zona, pero esto es largo, faltan dos rondas y media. Es un montón. Por ahora estamos para seguir peleando todos los partidos” concluyó el entrenador.
Por su parte, el goleador Patricio Cucchi, reconoció que “para un goleador lo mejor es anotar, pero mientras se dé el triunfo del equipo, estamos todos felices. Cada vez es más complicado mantenerse, pero estamos compenetrados en el objetivo y este plantel está para cosas importantes”, cerró.
Carlos Sperdutti: "Nos hicimos los dos goles"
Carlos Sperdutti no digirió la derrota y salió con los tapones de punta: “No podemos tener errores que nos cuestan el partido. La verdad es que no saco nada positivo de esta noche. Porque considero que Maipú tuvo más la pelota y si después no las supimos meter, es que no quedó nada positivo. La verdad, creo que nos hicimos los dos goles. El jugador debe entender que debe dar lo máximo para que la gente, la que viene de tantos lugares y paga su entrada con mucho sacrificio, nos siga acompañando. Si no dejamos todo, esta gente no nos va a acompañar más en esta cancha”.