Hace casi cuatro años en Gimnasia se producía una revolución.
Es que el Lobo venía de transitar por los Torneos Federales sin tener grandes éxitos. Por eso los socios buscaron aire fresco, renovación y por eso votaron a una persona que no era del mundillo del fútbol: Fernando Porreta.
Esta persona apareció decidida a cambiarle la cara a “su” Gimnasia, y lo logró, porque a base de seriedad y prolijidad el pueblo mensana ha sido uno de los que más festejó, y en dos años y medio logró lo impensado: el ascenso a la Primera B Nacional.
De ahí en más todo fue positivo en el Parque, ya que Gimnasia pasó a ser una de las instituciones modelo de la categoría al tener a los jugadores al día con los sueldos y también por los proyectos institucionales que se vienen. En una semana complicada, el titular mensana habló con Más Deportes, y lo hizo tanto de lo futbolístico como de lo institucional.
“La verdad es que estábamos ilusionados con estar más tranquilos en esta etapa del campeonato, ya que habíamos levantado desde el partido con Los Andes, pero con Central Córdoba el equipo tuvo un rendimiento muy bajo; creo que desde el partido con All Boys que no se jugaba tan mal, con poca actitud”, arrancó señalando el titular del Lobo, que no puede sacarse el hincha que lleva adentro.
“Si me hablan de presión, este equipo ascendió ante Talleres con más de 40 mil personas en contra, pero ahora hay algunas individualidades que estuvieron muy bajas. Hace 10 fechas estábamos preocupados y ahora lo estamos más, porque la derrota dejó a todo el equipo muy bajoneado”.
-¿Sos de los presidentes que se meten en los vestuarios a hablar con los jugadores?
-Ahora sí lo hago, antes no sabía si era bueno o malo. Generalmente voy al vestuario cuando jugamos de visitante, de local no tanto. Trato de acompañar al plantel para que (los jugadores) sepan que los apoyamos.
-¿Qué te dicen los hinchas ante esta situación que está viviendo el equipo?
-Me paran por la calle y me dicen que no les pague, pero eso no lo voy a hacer nunca, será con otro presidente, conmigo eso no pasará nunca. Por ahí sí hablarles fuerte para que sepan que uno está disconforme. Los jugadores son trabajadores y tienen que cobrar su sueldo; por ahí lo que hacemos es poner multas por expulsiones y esas cosas.
-Como presidente y como hincha, ¿cómo te cae que Gimnasia pueda caer en el descenso justo en la última fecha?
-Un poco angustiado por el momento, pero no hay que bajar los brazos justo ahora; tenemos que estar todos juntos. Quedan dos finales y tenemos que llegar a la última fecha con chances de salvarnos. Nos da un dolor inmenso, luego del esfuerzo para alcanzar lo que logramos, que ahora se pueda perder.
-Para colmo ni el fixture te ayuda, porque Brown de Puerto Madryn enfrenta a Unión de Mar del Plata, que ya está descendido...
-Los partidos hay que jugarlos y Unión no jugó tan mal ante Atlético Tucumán; esperemos que le pueda hacer partido a Brown.
-¿Cuál fue tu peor error?
-Varios, a veces me pongo a pensar en Atlético Paraná, que también estaba en el Argentino B con nosotros y no se reforzó, tiene los mismos jugadores de hace tres años y acá nuestros futbolistas tienen todas las comodidades. Por eso a veces te quedan dudas de algunas equivocaciones y de otras no.
-Lo bueno sería salvar la categoría para que el año que viene se puedan corregir esos errores...
-Eso lo tendría que decir el próximo presidente, ya que mi mandato termina el 8 de diciembre...
-¿Cómo el próximo?
-Tengo pensado no seguir porque siempre dije que lo bueno era la renovación...
-¿Pero la idea es seguir dentro de la comisión?
-No. Voy a estar cerca del club pero nada más. Hay que terminar las obras prometidas (la popular, el gimnasio, la parte de Las Terrazas) en el plazo que sea, salvo que la dirigencia nueva no me lo permita.
-Más allá de los logros deportivos que conseguiste como presidente de Gimnasia, ¿con qué otra cosa te vas conforme de tu mandato?
-De los sueños que se cumplieron, desde el más chico hasta el más grande. Cada sueño fue importante, pero tiene que haber renovación, cambio en el presidente, y es algo que lo vengo diciendo desde hace tiempo.
-Si hoy viene el hincha genuino de Gimnasia y te pide que sigas, ¿pensarías en dar marcha atrás con la decisión de no seguir como presidente?
-No porque lo haría a medias, y no me gusta hacer las cosas así. Tengo que solucionar temas personales, y eso no me permitiría estar a full con el club. Sería una figura que no tendría la cabeza las 24 horas del día en Gimnasia.
-Otros dirigentes, cuando deciden no seguir dejan a alguien de su riñón al frente del club. ¿Vos harás lo mismo?
-No, que los socios decidan quién será el próximo presidente. No lo he pensado ni lo voy a pensar porque no soy nadie para dejar a alguien, soy un hincha y nada más y no creo que un dirigente tenga que dejar a otro a dedo en un puesto tan importante. Ojalá que haya muchas listas y que se armen comisiones que puedan seguir con los sueños que planteamos y que falta ejecutar.
-¿Te faltó cumplir algún sueño?
-Faltaron muchas cosas, como el trabajo de las inferiores: tiene que haber un proyecto a 10 años que será el semillero para el futuro y llegar de otra manera a la B Nacional, no como nos pasó ahora. Pero todo eso lo puede cumplir el próximo presidente. Estamos terminando un libro con todos los sueños que cumplimos y lo que falta por cumplir; ojalá que al nuevo presidente le sirva para ver qué hay que hacer, si no vendrá con nuevos sueños.
-¿Pensás que hiciste escuela entre los dirigentes que se presentarán para sucederte?
-Sí, pero creo que los que lleguen tratarán de repetir lo bueno que se hizo y corregir los errores que cometimos. Desde la dirigencia hicimos todo para que Gimnasia termine bien el año.
-¿Cómo te imaginás en 15 días?
-Ojalá que sea como todo hincha de Gimnasia quiere. Dejaremos todo para que nos quedemos, pero creo que está ahora en los jugadores tener un buen partido para que Gimnasia siga en la categoría.
El proyecto de reducir los descensos
“Este proyecto no venía desde ahora, sino que venía desde hace tiempo porque la dirigencia de la B Nacional quería equiparar los descensos con las demás categorías. En todos descendían dos y en la B Nacional bajaban cuatro; por eso buscaron unificar”.
"Lo que pasó fue que nosotros, junto con Sportivo Belgrano, quisimos refrescar eso, pero no tuvimos unanimidad y se cayó la propuesta".
"Queríamos apoyar la propuesta para que se queden más equipos en la B Nacional porque ahora nosotros no estamos en descenso, entonces esta propuesta favorece a otros clubes que están más complicados".
