Nuevos paradigmas de trabajo están emergiendo con la tecnología. El mundo económico promete profesionales responsables de sus desarrollos de carrera, empresas en la búsqueda y retención de sus talentos para seguir encantando a un cliente más informado, que exigirá más calidad al mejor precio. Las nuevas estrellas en las empresas, y fuera de ellas, esto es lo que impulsan sus propios emprendimientos, serán los que poseen las nuevas habilidades como pensamiento crítico, innovación y resolución de conflictos.
En una charla en el Hotel Hyatt, titulada "La Revolución de las habilidades: de consumidores de trabajo a constructores de talento", el vicepresidente de Manpower Group, Fernando Podestá, delineó con precisión los desafíos que se abren en el mundo laboral, y los nuevos roles que deberán asumir sindicatos, centros de educación y, obviamente, empresas e individuos.
-¿Qué significa la revolución de las nuevas habilidades?
-Es desarrollar y hacer foco en detentar características como pensamiento crítico, resolución de problemas, inteligencia emocional, es decir todas esas habilidades que son humanas y que no las poseen robots, ni el software, ni el mundo digital. Las nuevas tecnologías nos impactan a todos y obviamente su influencia es enorme en el campo del trabajo. El desafío es poder adaptarnos. Los que lo logren y desarrollen nuevas habilidades tendrán el mundo del trabajo y podrán elegir y establecer sus condiciones de empleo. En lo que nos tenemos que focalizar empresas e individuos es en las habilidades que son intrínsecamente humanas.
- ¿Qué significa ser consumidores de trabajo?
-Es lo que ocurre hoy, o sea las empresas necesitan una habilidad, la buscan y cubren su posición, pero luego no se ocupan de crear las habilidades que los ayudará a nuevos desarrollos. De esto se trata, de ser constructor de talentos. Las empresas van a tener que procurar que las personas desarrollen las habilidades que ellos van a necesitar a futuro.
-¿Y desde el punto de vista de las personas?
-Es saber que todos los meses y todos los años debemos estar aprendiendo y en permanente cambio para poder ser empleable en forma continua. Por lo tanto el desarrollo de carrera es una responsabilidad de las personas.
-¿Cuáles son las habilidades del pasado y del presente y futuro?
- A futuro tiene que ver con la creatividad, innovación, pensamiento crítico, la capacidad de resolver problemas, mirar los problemas y repensar los procesos y la métrica. Es decir todas las capacidades que no resolverá la inteligencia artificial. La inteligencia emocional, lo que es intrínseco del hombre, no va a poder ser remplazado nunca. Eso es el foco y nos valemos de la tecnología para dar un paso. Hay mucha gente que no tiene el trabajo que le gusta, no lo desafía, no le permite realizarse como persona pero tienen que vivir. Esas tareas probablemente las van a realizar robots, la inteligencia artificial, todo lo que tiene que ver con lo derivado de la tecnología porque son rutinarias.
-¿Cómo está Mendoza ante esta realidad? ¿Estamos preparados para enfrentar esos desafíos?
-En Mendoza, comparando su economía, depende mucho de los mercados externos y no tiene la fuerza que tienen otras regiones. La expectativa de empleo es muy plana y con pocas ganas de crecer. Igual yo soy optimista ya que en la provincia hay talento sobrado. La ironía es que por un lado tenemos escasez de talentos. El 59% de las empresas en Argentina dice que tiene escasez de talentos. Eso quiere decir que no pueden encontrar a la persona adecuada para determinados puestos. En Mendoza lo hay y si no ¿cómo se explica el gran éxodo de profesionales de la provincia hacia Chile? Hay que volver a las raíces para poder seguir generando oportunidades para los mendocinos y la verdad es que hoy la tecnología lo permite. Lo que sucede es que hay que cambiar la mentalidad y eso cuesta en la gente.
-¿Cuáles son los trabajos que están en riesgo?
-Hoy la tecnología permite que una persona pueda controlar la seguridad de hasta 6 edificios. Los encargados de edificios van a tener problemas de empleabilidad. Hoy, en todas las profesiones, 35% de las tareas son repetitivas y pueden ser remplazadas. Otro perfil amenazado es el playero de las estaciones de servicio que carga combustible. Hoy podrían no estar. El desafío para que esas personas no pierdan esos puestos de trabajo es que las empresas o ellas mismas desarrollen otras habilidades.
Perfil
Fernando Podestá. Fernando Podestá. Es casado, con cuatro hijos. Lleva 22 años en Manpower Group, empezó abriendo la sucursal de Mendoza y de ahí no paró. Abrió nuevas sucursales en San Juan, San Luis, y sur del país. Su actual cargo de vicepresidente de Manpower Group lo ejerce desde hace unos meses, donde gran parte de su caudal laboral lo desarrolla en Mendoza.
"No quiero perderme de seguir acompañando a mis hijos al rugby, ni las caminatas con mi señora como tampoco del encuentro de tenis con mis amigos de toda la vida. Hoy gracias a la tecnología lo puedo lograr", confesó feliz.
