Fernando Lanzone está a cargo de la presidencia de la Asociación Ciclista Mendocina. Ocupa este lugar, tras el fallecimiento de Don Francisco Chila. Para ejercer el puesto, como vicepresidente de la ACM, llamó -en 2015- a una Asamblea extraordinaria y contó con el apoyo del concejo Directivo de la entidad.
Sereno y convencido de sus accionar y de poder cumplir con sus metas, Lanzone dialogó con Más deportes, con el fin de hacer su balance al frente de la ACM y contar cuales son sus proyectos si renueva su mandato.
-¿Por qué querés seguir al frente del ciclismo?
-Porque lo llevo en la sangre. Si bien no fui ciclista destacado y tampoco técnico, me inicie a los 18 años conduciendo el coche guía en las carreras de ruta (1989). Recién había sacado el carnet y me ganaba unos pesos. Poco a poco fui aprendiendo el reglamento y descubrí una pasión que hoy es parte de mi vida.
De esos tiempos, de gran masividad, recuerdo los últimos años de Pujadas, Leyton y los comentarios de otros periodistas que seguían la temporada. Con dolor y nostalgia veo que las cosas cambiaron y que las grandes radios dejaron de cubrir las fechas y que solo los diarios difunden nuestra actividad.
-¿Por qué cambiaron?
-El mundo cambió y no debemos enojarnos con la realidad. Pero como dato te puedo decir que no todo es negativo, en los ‘90, teníamos una Vuelta de Mendoza con 70 u 80 corredores en el pelotón.
En la edición 2017, contamos con más de 150 pedalistas; quiere decir que en este período de transición, no siempre y no en todo, lo pasado fue mejor.
-¿A qué se debe que adelantás la Asamblea?
-Si dejo pasar el tiempo y llegamos a esa fecha, inmediatamente entraremos en diciembre con las despedidas de año y las vacaciones.
Tradicionalmente en el segundo mes del año celebramos la Vuelta de Mendoza. ¿Me querés decir como organizamos ese evento con tan poco tiempo? Por eso, iniciada la temporada de pista y con dos meses más , quien gobierne el ciclismo tendrá más tiempo de trabajo.
-¿Cómo evalúas la temporada de pista de este año?
-Aquí tenemos un problema o mejor dicho una particularidad cultural. Para el mendocino el ciclismo es de ruta. Cuesta hacer entender que la pista es atractiva y que tenemos el mejor Velódromo del país. De todas maneras, hoy promediamos 40 corredores por fecha, y sumamos chicos de las categorías 2004 a 2007.
Por esto quiero destacar el trabajo de Gustavo Alaria y de un joven plantel de ex-ciclistas que se van formando como técnicos. Debemos sustentar a Leonel Cuni, Emiliano Avellaneda, Leonardo Disanto, Pablo León y Marcelo Cádiz, que conforman un staff de trabajo muy ordenado.
Recibimos la ayuda de los municipios y la Subsecretaria de deportes. Queremos mejorar la performance en los Binacionales y no desconocemos que hoy los grandes equipos del mundo salieron de las pistas.
-¿Cómo se observan la presencia de los clubes?
-Muchos clubes fundacionales desaparecieron. Son un recuerdo de un tiempo irrepetible. Hoy se ve el deterioro de las Asociaciones intermedias sin fines de lucro, por eso quiero volver a destacar el apoyo estatal a los clubes de barrio. en la ACM hay ocho clubes afiliados que merecen ser recuperados, y esta es nuestra tarea.
-¿Las carreras de pista tienen mucho costo?
-Sin el aporte de la ambulancia por parte del Estado sería casi imposible. El detalle de gastos es encabezado por los premios, lo que perciben los comisarios (que forman un cuerpo de gran prestigio) y los seguros del espectador. Si logramos aumentar los espectadores podríamos sustentarlos sin problemas.
-Hablemos de la ruta. ¿Qué evaluaciones hacen?
-Con la Vuelta de Mendoza y las fechas que organizan los clubes, es decir 12 reuniones de ruta nuestro mérito fue volver a ser creíbles.
Tuvimos temporadas sin accidentes y para las competencias más importantes volvimos a traer equipos internacionales. Más allá de ganar o no las elecciones, seguiré en el ciclismo y trabajaré de la misma manera y el entusiasmo que desde hace ya casi 30 años.