"Dicen que Fernando Grajales es uno de los "padres" del andinismo mendocino (junto a otros como Alejandro Randis, Rudy Parra, Andrés García, Ulises Vitale y Alejandro Magnani). Murió hace poco más de una década, a los 79 años. Dejó tras de sí un legado imborrable para aquellos que lo conocieron. Fue, además, pionero en esta actividad, al punto de formar parte de la primera expedición argentina al Himalaya", describía la nota con motivo de la presentación de un libro dedicado a su vida.
A los 16 años, comenzó la pasión de Grajales por la montaña. De los cerros de la precordillera, pasó al Cordón del Plata y luego al Aconcagua, donde abrió una ruta nueva en el filo sudoeste. Y cuando se enteró de la gestación de la primera expedición argentina al Himalaya (1954) no dudó en sumarse.
“Grajales asumió un rol de hacedor cuando colgó la mochila. Creó la primera empresa de servicios en Aconcagua, en 1976, y participó institucionalmente en la actividad de montaña local. De los varios premios y títulos que recibió, uno en especial alude al reconocimiento de sus pares: Fernando fue una de las pocas personas que la Escuela Provincial de Guías de Alta Montaña y Trekking Valentín Ugarte designó como miembro honorario”, cierra la introducción del texto elaborado por el periodista y montañista Nicolás García.