Si el presidente de la Nación viaja al exterior, debe tomar su lugar transitoriamente el vicepresidente; pero si éste también estuviera ausente, debe tomar las riendas de la Casa Rosada el presidente provisional del Senado. Este último cargo es el que podría ocupar la mendocina Anabel Fernández Sagasti.
El nombre de la referente de La Cámpora para el segundo cargo en la línea de sucesión presidencial empezó a sonar con fuerza cuando quedó descartada la posibilidad de que fuera jefa del bloque del Frente de Todos, puesto para el que ya fue confirmado el formoseño José Mayans.
Fernández Sagasti tiene mandato hasta 2021 y es la estrella ascendente del bloque Frente para la Victoria-PJ que preside el experimentado senador saliente Marcelo Fuentes (Neuquén) y que integra y lidera políticamente Cristina Kirchner.
La mendocina no solamente tiene línea directa con la futura vicepresidenta y expresidenta de la Nación sino también un excelente vínculo con el presidente electo, Alberto Fernández, quien en la campaña electoral vino a Mendoza a apoyarla de manera contundente en la pelea por la Gobernación provincial, que finalmente perdió contra el radical Rodolfo Suárez.
Fernández Sagasti tiene 35 años, es abogada y martillera pública egresada de la UNCuyo. Si finalmente fuera la sucesora del macrista Federico Pinedo, le tocaría conducir las sesiones del Senado y coordinar las reuniones de Labor Parlamentaria con los jefes de los bloques, en ausencia de Cristina Kirchner.
Danza de nombres
El senador electo Oscar Parrilli, exsecretario general de la Presidencia entre 2003 y 2015, también sonó en estos días como presidente provisional, pero su figura al parecer quedó descartada porque el neuquino es la mano derecha de Cristina Kirchner: es prácticamente su secretario privado, su hombre de mayor confianza y, por ende, quien la acompañará en sus actividades políticas y en sus viajes. En otras palabras, lo necesita a su lado.
Otro futuro senador oficialista de peso político propio que también podría tener un rol destacado en la Cámara es el bonaerense Jorge Taiana, que asumirá en reemplazo de Cristina Kirchner y completará su mandato hasta 2023.
Taiana, por su desempeño como canciller entre 2005 y 2010, podría presidir la estratégica comisión de Relaciones Exteriores, en la que se debaten, por ejemplo, pronunciamientos sobre Malvinas, el acuerdo entre el Mercosur y la Unión Europea y la situación de los países de la región que están particularmente agitados, como Bolivia, Chile, Perú, Ecuador o Colombia.
Un solo bloque
Así como Cristina presidirá el Senado y Fernández Sagasti podría ser la presidenta provisional, el formoseño Mayans será el jefe del bloque oficialista del Senado, que no será interbloque como inicialmente se preveía, sino una única bancada que integre a los cristinistas, los camporistas y los justicialistas que se referencian en los gobernadores.
Así se informó desde el bloque FpV-PJ, donde descartaron la posibilidad de que la decisión sea por votación. Es decir que el nombre del futuro conductor de la bancada peronista fue una determinación de la vicepresidenta electa.
Según dijeron, la idea es que en el Senado y en Diputados los bloques funcionen como espejos; es decir que todas las decisiones y estrategias parlamentarias sean coordinadas para ser exitosos en las sanciones de leyes.
En Diputados también se trabaja en la conformación de un bloque único presidido por Máximo Kirchner. Es decir que no habrá interbloque, como pretendía el santafesino Agustín Rossi, quien sería alejado de la Cámara Baja para integrarse al Gabinete de Fernández como ministro de Defensa, cargo que ya ejerció con Cristina Kirchner entre junio de 2013 y diciembre de 2015.
