El candidato a presidente del Frente de Todos, Alberto Fernández, se quitó hoy responsabilidad en la suba del dólar y, por el contrario, afirmó que lo hizo bajar de 67 a 57 pesos después de haber afirmado que una cotización de 60 pesos era razonable.
El exjefe de Gabinete de Néstor y Cristina Kirchner sostuvo que los mercados reaccionan a la baja como consecuencia de la política económica del gobierno de Mauricio Macri y no por sus declaraciones, como se le atribuye.
Cabe recordar que en una entrevista publicada por Clarín el domingo, el candidato más votado de las primarias abiertas dijo que iba a hablar con los tenedores privados de bonos argentinos, "hay que sentarse a discutir, uno por uno, como hicimos con la deuda en su momento". Ese momento era 2004-2005, cuando se renegociaron los bonos en default. El lunes todos los papeles argentinos bajaron su cotización.
Volviendo a las declaraciones de ayer, Fernández señaló que para contener el dólar se calculaba que el Central iba a tener que vender reservas por U$S 3 mil millones. "Parece que están decididos a liquidarlas (a las reservas del BCRA) a cambio de que el dólar no se escape, pero se escapó de tal modo... Llegó a costar 67 pesos hasta que yo fui y sostuve, como dijo Emmanuel Álvarez Agis, que el dólar a 60 estaba bien. Entonces, logramos bajar el dólar a 59, 58. Hoy está en 57", dijo el candidato K.
En una entrevista que le concedió a Radio 10, el postulante opositor confirmó que el lunes el Presidente volvió a llamarlo por teléfono para que su equipo económico a reunirse con el flamante ministro de Hacienda, Hernán Lacunza, lo que aceptó pero señaló que también debería invitar a los economistas de otros espacios políticos, como Consenso Federal, que postula a Roberto Lavagna.
"Ayer me habló de la idea de juntarse (mi equipo) con el equipo de Hernán Lacunza, pero le dije que invite a todos, al equipo de Lavagna, a todos", aseveró.
Fernández sostuvo que ayer volvió a pedirle a Macri "que no mezcle la campaña con la Presidencia, porque tiene que cumplir el rol de presidente" y afirmó que "la gobernabilidad depende de Macri".
"Más que la gobernabilidad, lo que más me preocupa es la tranquilidad de la gente... Cuando estás en el gobierno estás para resolver problemas, no para que te aplaudan los éxitos. Uno debe ayudar a la gobernabilidad en tanto signifique tranquilidad para la gente", sostuvo el candidato.
También cuestionó al Gobierno: "por un lado, el Presidente pide que las fuerzas opositoras comprendan y después la escuchás a (Elisa) Carrió diciendo barbaridades por los medios y entonces te preguntás cómo funciona esto".