Los restos de Araceli Fulles, la joven hallada asesinada el jueves bajo escombros en una casa de la localidad bonaerense de Loma Hermosa, fueron inhumados hoy en el cementerio de San Martín, con la presencia de decenas de familiares y amigos que cuestionaron cómo llevó adelante la investigación la fiscal de la causa.
Mientras tanto, el principal sospechoso del crimen, Darío Badaracco (29), quien fue detenido el viernes por la noche en el barrio porteño de Flores luego de que una vecina lo identificara y avisara a Gendarmería, fue trasladado ayer por la tarde para ser indagado por la fiscal.
Ayer por la mañana el padre de Araceli, Ricardo Fulles, afirmó: "Todavía no sabemos por qué se ensañaron así, de esa manera. La maldad que tienen... no puedo entender esa parte. Tenemos tristeza en el alma y en el corazón", dijo.