"Soy músico, tan simple como la corteza del pan", le dijo una vez al periodista Gregorio Torcetta. Y lo dijo sin artificios, con una metáfora que (ella misma) era un gesto de simplicidad.
Félix Dardo Palorma se explayó: “(Soy) un simple observador de nuestras cosas regionales. He recorrido siempre el país. Me he acercado a la gente. Luché por la lingüística nacional, por lo autóctono, por las cosas regionales, soy un amante de la tierra. Intenté expresarlo en una copla: Yo soy fuego que se deja / y se tapa con cenizas / y por ser de buena leña / amanece al otro día”.
Con esa retórica cristalina y esa humildad se expresaba Palorma, quien había nacido en San José de Corocorto (hoy La Paz) el 23 de mayo de 1918.
Hoy se cumple un siglo y, entre distintas actividades esparcidas por la provincia, se trae a la memoria su nombre; uno de los ineludibles de la cultura cuyana.
Los acordes y los paisanos
Félix Dardo Palorma (1918-1994) nació en un pueblo de Yopacto, antigua encomienda donde vivían nativos huarpes, y dio sus primeros acordes bajo el nombre de Félix Robustiano. Tal como él explicó en la entrevista anteriormente citada, el “Dardo” vendría después”, cuando Luis Rosales (en 1941 director de Radio Belgrano) se lo sugirió.
Ya antes había recorrido el país cantando en "Brochazos de tradición". Conoció de primera mano la música del Litoral, en Santa Fe.
Y de su larga carrera se desprenden más de 200 canciones registradas en SADAIC, de la que fue incluso delegado (la mayoría de esas piezas son aún hoy desconocidas).
Incluso tuvo su paso por el cine industrial: entre 1951 y 1952, le adjudicaron por concurso la musicalización de la película que protagonizaron Gene Tierney y Rory Calhum para la 20Th Century Fox, "El camino del gaucho".
Por este hecho, fue invitado para asistir al estreno en Hollywood, algo que humildemente declinó, porque “yo me estaba haciendo mi casita en Hurlingham por administración y no podía dejar eso, que para mí era más importante que viajar”, explicó en su momento.
Basta enumerar algunos de sus clásicos: "Póngale por la hileras" (¿otro himno mendocino?), "Zamba de la noche alta", "Llegando a Cuyo" y "La Cumbreña". Todas retratan a la cuyanía como en un espejo.
Es que él nunca quiso despegarse de la cultura popular, esa que respira entre peñas en el campo profundo. Y en una época donde los folcloristas buscaban la renovación del estilo, como el Cuchi Leguizamón, él maduró un cancionero menos complejo armónicamente y más “cantable”, forjado con tónicas y dominantes.
“Cuando uno sale de la provincia y recorre el país, se da cuenta que él es uno de los íconos de la música popular folclórica argentina”, asegura el cantautor Roberto Mercado. “Porque él es uno de los autores que (fuera de la región de Cuyo) más se conocen. Cuando se habla de música cuyana, te piden temas suyos”, dice.
Y amplía: "Esto tiene que ver también con sus más de 25 años de residencia en Buenos Aires, y por haber actuado en las principales radios de allá, que por ese entonces eran los medios que difundían la música folclórica".
Mercado destaca que la admiración que existe por él no se da solo por su música, sino también por su poesía.
¿Y se podría describir a Palorma en pocas palabras? "Me lo definió muy bien una vez el presidente de la Academia Nacional de Folclore, Antonio Rodríguez Villar: 'Él era un músico que buscaba la simpleza, como si eso fuese sencillo'".
Hoy sus restos descansan en el mismo lugar donde nació, y cada aniversario de su natalicio se celebra en la provincia el Día del Compadre.
Hilera de homenajes
Este año, a raíz del centenario, verán la luz otros proyectos también en torno a su figura.
El propio Roberto Mercado protagoniza uno, junto al otro “palormiano”, Oscar Domínguez. Según explicó el cantautor oriundo de Junín, siempre había existido la intención de una colaboración discográfica entre ellos, pero el aniversario redondo fue la ocasión perfecta: en “Roberto Mercado-Oscar Domínguez, Palorma ciento por ciento” (edición auspiciada por la Secretaría de Cultura, 2018) se rescata una porción de la obra de Palorma menos conocida (cuecas, zambas, milongas, tonadas, valsecitos cuyanos).
Sin embargo también hay clásicos, poemas de sus libros de poesía, e incluso una canción inédita de la que solo existía registro casero en vivo.
Algo de este disco se estará adelantando mañana, en la Velada Patriótica y en Homenaje a Palorma que se realizará en La Paz (Club Juventud Unida, a las 21).
El 25, actuarán en el aniversario y fiesta patria del Club 25 de Mayo de Philipps, Junín (a las 13), y en la Peña Patriótica en homenaje a Palorma (Espacio Julio Le Parc, a las 16.30). Al día siguiente, viajan hasta Los Barriales, donde tocarán en La Oreja (Ruta 60 y Miguez, a las 22).
Y a propósito del centenario, desde la Facultad de Artes y Diseño de la Universidad Nacional de Cuyo se está pensando un gran “Homenaje a Palorma”, que tiene un eje académico y un eje artístico.
“El primero de ellos consistirá en la elaboración de un ‘Cancionero Palorma’-explica el músico y docente universitario Polo Martí-, conteniendo partituras y sistematizando el material para fines didácticos y artísticos, y la realización de un ‘Seminario Abierto’, entre setiembre y octubre próximos, a cargo de destacados estudiosos y cultores de la música, la canción y la obra literaria de Palorma”.
Amplía: “Y, por otro lado, se producirán materiales discográficos con grabaciones inéditas, y arreglos y orquestaciones realizadas por el propio Palorma, que serán grabadas por estudiantes y docentes de nuestra Facultad junto a músicos invitados y presentadas en el 16° Encuentro de Música Popular, en el mes de octubre, en su homenaje”.
Como sostiene Martí, “sus creaciones configuran un eslabón fundamental que articula el sentimiento genuino de las expresiones tradicionales con un espíritu de innegable renovación, sin perder su sentido verdaderamente ‘popular’”.
“No en vano algunos de los referentes fundacionales del recordado Movimiento Nuevo Cancionero, como Armando Tejada Gómez, Eduardo Aragón o Tito Francia, han considerado la obra de este ilustre paceño como clave para el surgimiento de dicho movimiento; una ‘llave’ que permitió continuar una línea creadora inspirada no solamente en la tierra y en su paisaje, sino en su gente, en las mujeres y hombres que han labrado una historia, un cultura y una idiosincrasia que se fortalece con estas obras que abrevan en sus raíces y se proyectan a nivel universal”.
Y para finalizar, agrega: “Ya lo expresó el gran escritor y estudioso del folclore cuyano, don Juan Draghi Lucero, en el prólogo del libro ‘Lo que no ha sido, vive solo en Dios’ -cantos poetizados- de Félix D. Palorma, de 1989: ‘Palorma como poeta es un caso original: sintiéndose cuyanísimo se siente a la vez universal. Sus variadas descripciones, en las que parece tener un gusto muy personal, y a la vez sus sueños líricos lo sitúan como hombre de gran sensibilidad, todo dentro de la cobertura de su sencillez y humildad de las que no se aparta’.
En este marco es que hoy actuará la Orquesta Sinfónica de la UNCuyo, con Pablo Herrero como director invitado. Será a las 21.30 en la Nave Universitaria y el repertorio estará compuesto por arreglos de Martín Vicente. Habrá artistas invitados: Ensamble Vocal 4 Rumbos, los cantores Montuelle Dúo, Jorge Oyarzábal, Dante Palorma, Juanita Vera y un conjunto de seis guitarras cuyanas.