Más de cinco mil atletas el domingo le dieron vida a una nueva edición de la Maratón de Nueva York, una de las carreras más atractivas y populares entre los atletas profesionales y amateurs de todo el mundo. “Atravesas los cinco distritos de la ciudad, desde la partida en Staten Island, las calles de Brooklyn, Queens, el Bronx y Manhattan, donde está la meta”, le contó a Más Deportes Federico Peñaloza.
El mendocino completó la odisea de los 42 kilómetros por la Gran Manzana con un tiempo de 2h55’56”. Arribando a casi 35’ del representante nacional en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016, Mariano Mastromarino (2h 20’08”).
El marplatense fue el mejor runner latinoamericano en la general del Marathon Majors, que fue liderado por el eritreo Ghirmay Ghebreslassie. El campeón mundial de esta especialidad reinó en el podio con una marca de 2h07’51”.
Mientras que, María Keitany ganó por tercer año consecutivo esta prestigiosa prueba, esta vez con un registro de 2h24’26”. La fondista de Kenia frenó la carrera apurada de los relojes a menos de dos minutos del récord del circuito neoyokino (2h22’31”) establecido por su compatriota Margaret Okayo, en 2003.
Desafíos, sobre desafíos
Raúl, ex futbolista del Real Madrid, debutó en Nueva York con un tiempo de 3h26’05”. En tu Twitter publicó: “Reto conseguido”. Tanto para el ex jugador Merengue, como para el mendocino Federico Peñaloza haber cumplido con un el primer eslabón del circuito de las “grandes” ya es un premio.
Peñaloza saboreó el éxito al completar su primer Marathon Majors.“Me fue muy bien y pude cumplir con el objetivo que me había propuesto desde que empecé a entrenar para esta carrera. Llegué con un tiempo de 2h55’56”; mi gran objetivo es poder completar las seis grandes por debajo de las tres horas de carrera”.
“Salí a la calle en la primera ola de corredores, estaba en la categoría semipro por el tiempo clasificatorio que había logrado en la Maratón de Buenos Aires (2h49’). En el carril de al lado estaban los competidores de Elite... fue increíble, estábamos corriendo al mismo tiempo, largamos con la misma señal. Nunca me hubiese podido imaginar, que minutos antes, entraría en calor junto a ellos. Me sentí importante”, detalló Peñaloza.
“Buscaba un buen tiempo en esta carrera porque es una competencia muy dura, hay mucha gente alentando a los corredores, por algo la llaman la carrera del Millón y es así. Estuve entrenando un año entero para esta carrera y tanta constancia finalmente dio sus frutos”, finalizó el mendocino.
