Alguien una vez dijo que los ojos son el espejo del alma. El que mire a los ojos de Federica Cafferata verá reflejada su transparencia, su sensibilidad, su paz, y sobre todo su claridad sobre las cosas. Federica, llegó al mundo del cine con tan sólo 8 años protagonizando “Road July”, luego gracias este papel viajó a Nueva York, a un festival donde la directora rusa Marina Shron le ofreció participar en su corto “Sea Child”.
Un corto que, después de dos años de la propuesta, Fede filmó en Colombia junto a los actores Viña Machado y Juan Manuel Díaz Orostegui. Unos días atrás, este cortometraje fue seleccionado por el Festival de Cannes para ser proyectado en él.
Tan sólo es la punta del iceberg, esta noticia que abre los horizontes del arte mendocino llevándolo hasta Francia, nos da la oportunidad de hablar con Federica, Federica persona que transita su propio camino.
Con el objetivo de usar la actuación como una forma para llegar a hacer algo en el mundo, la vocación de Cafferata por ayudar y hacer la diferencia en el mundo cada vez va creciendo más, inspirada por su lectura sobre las vidas de Nelson Mandela, José Mujica y Malala Yousafzai.
Algo florecerá, tal vez no sea solamente un papel en alguna película, sino algo mucho más trascendente, algo que haga realidad las palabras de Federica cuando, con sus ojos firmes y a sus 15 años, dice: “Yo quiero hacer algo que provoque un cambio en la humanidad”.
-¿Cómo tomaste la noticia de que ibas a Cannes?
-Estaba sentada haciendo ejercicios de física y de repente me llega una notificacion de Facebook. Era publicación del productor del corto desde Colombia que decía “Sea Child ha sido elegido por Cannes para ser proyectado del 13 al 24 de mayo”, nada más.
No lo podía creer, pensé que no era 'el' Festival de Cannes sino que era otro que se llamaba igual y justo coincidía. Entonces le escribí a Jairo, el productor, y me respondió que efectivamente era el Festival, me temblaban las manos, no lo podía creer. Estaba emocionadísima y muy sorprendida.
“Sea Child” es un cortometraje sobre una niña que se resiente ante la fuerza de la gravedad y descubre que el agua es su hábitat natural. La directora Marina Shorn se inspiró en su niñez, etapa de la vida en el que se preguntaba con frecuencia: ¿por qué la gente no podía vivir bajo el agua? El corto no entra en el marco de la competencia sino que Cannes elige lo mejor de lo estrenado en el 2014 en Europa. Hay un espacio que es de exposición de estos cortos que se llama Corner donde se proyecta y se proyectará la imagen de Federica.
-¿Van a viajar?
-Debe ser increíble viajar a esta 68 edición del Festival. Hablaba con mis amigas sobre esto y me decían: lo peor es que vas a estar ahí, ver un montón de actores, directores y no podés ir corriendo a abrazarlos (risas).
Estamos tratando de encontrar con mi mamá sponsors que nos ayuden a hacerlo posible, porque la noticia nos llegó de sorpresa y es difícil poder hacer un viaje así de la noche a la mañana, además creo que estaría bueno como una forma también de promocionar a Mendoza desde lo cultural.
-¿Porqué no te gusta que te identifiquen como actriz?
-No sé si es que soy tímida o introvertida pero no quiero que sea sólo eso lo que me defina. Yo sé que tiene un peso el ser actriz, porque a través de eso se puede hacer mucho, es una buena manera de llegar a distintos puntos, ya sea trabajo o voluntariado o ayuda. Pero no quiero que eso sea lo único.
-¿Y con qué sí te identificás?
-Me gusta el estilo de Emma Watson, ella tuvo papeles totalmente hollywoodenses, pero estudió y con su título universitario tiene una campaña feminista. Usa su figura pública para hacer bien, el estar en el cine no tiene porqué ser siempre asociado al lujo, al glamour o estar en un escalón más arriba, es simplemente algo más que tiene que ser usado de la mejor manera.
-¿Has tenido alguna oportunidad de poner esto en práctica?
-Ahora estoy trabajando como voluntaria en una asociación que se llama CIMA. Ayudan a niños de comunidades en Pedriel y Agrelo, además de darles abrigo y alimento, les brindan apoyo para el colegio. El 13 de marzo pasado fue mi cumpleaños de 15, y le pedí a la gente que en vez de comprarme regalos, con ese dinero hicieran donaciones para la fundación.
-¿Todo esto te hace reflexionar qué querés hacer en el futuro?
-Decir que no quiero ser actriz, no. La verdad es que está bueno aprovechar una oportunidad así que no se le presenta a cualquiera, además me encanta el cine. Pero no quiero sólo dedicarme a eso, sino poder respaldarlo con algo que aporte, que sume. Por ejemplo me interesa el derecho, en especial de las mujeres y de los niños.
Creo que está bueno dedicarse al cine siempre aportando con el estudio, y no dejarlo de lado como muchos artistas que porque empezaron una carrera de actuación abandonaron sus estudios.
-¿Tenés algún proyecto más allá de viajar a Cannes?
-Nada por ahora, debería buscar castings pero no lo hago. Pasa que siempre las oportunidades se me han dado, es como que me encuentran justo en el momento que me tienen que encontrar. Muchas veces me han preguntado si me gustaría trabajar en novelas del estilo “Casi Ángeles”, y no, no es mi estilo. A mi me gusta el cine, el buen cine, el cine que te muestra una historia que tiene algo más que ser sólo una película.
