¿Se le escapó el triunfo o se lo arrebataron al Cruzado? El arbitraje de Gerardo Méndez (Buenos Aires) tuvo varios altibajos y en un penal inexistente, el elenco de Ferro de General Pico llegó al empate cuando restaban 20 minutos para la finalización del partido.
A pesar del sabor agridulce del empate, el Cruzado sumó un punto y es más que positivo, ya que se mantiene en los puestos de vanguardia y llega motivado para la próxima fecha, cuando reciba en el estadio Mundialista a su clásico rival: Gutiérrez Sport Club.
El Botellero mostró en la primera mitad su mejor versión. Línea de tres hombres en el fondo, gran retroceso de Montaña y Morán por las bandas, el doble cinco se hizo fuerte en la mitad y desde allí nacieron varios contragolpes de buena factura. Sobre los 30’ el Cruzado fue una aplanadora. Generó cuatro situaciones de peligro. Recién en la última, la “joya” Jofré (de gran partido), conectó un centro preciso de Montaña y puso el 1-0. El Cruzado plasmaba en la red la superioridad mostrada en el campo de juego. Podría haber aumentado, pero el juez ignoró dos claros penales antes del entretiempo.
En el complemento, otra fue la historia. Ferro se animó un poco más, adelantó sus líneas, pero el Cruzado se mostró compacto. Todo cambió a partir del penal inexistente que le cobraron a Morán por un supuesto agarrón. Llegó el empate de Blanco y otra fue la historia. El Cruzado defendió con uñas y dientes el empate y lo logró. Ahora, a pensar en el Celeste.