Fascinación por la oscuridad: “Dark”, la serie éxito

“Sé que fue casi atroz mientras duró y más aún durante las desveladas noches que lo siguieron”. La frase es de Jorge Luis Borges y el adjetivo que más nos resuena después de leerla es el que más apropiadamente se aplica también a lo que su relato, titulado El otro (El libro de arena, 1975), quiere contar: un encuentro consigo mismo mediante un viaje en el tiempo.

“Atroz” bien podría ser el adjetivo que acompañe también a los hechos que narra Dark, la serie de Netflix que, a días de ser estrenada en la plataforma de streaming, se ha convertido en un nuevo suceso que se puede medir fácilmente: muchos de nuestros conocidos también la están viendo ahora.

Dark es, en principio, una rareza entre las ofertas de series producidas por Netflix. Mientras aún la empresa goza de las mieles del éxito de la segunda temporada de Stranger Things, apuesta a una realización alemana de factura impecable en todos los aspectos técnicos y artísticos.

La serie atrapa, en principio, por el misterio que instala ni bien comienza: en el pequeño (y ficticio) pueblo de Winden acaba de desaparecer un niño.

El hecho policial preocupa a las familias, pero pronto a él se suma otra desaparición, que es la que despierta en Ulrich Nielsen (Oliver Masucci), el padre del pequeño (Daan Lennard Liebrenz), la sospecha de que están produciendo hechos calcados a los de 33 años atrás, cuando fue su hermano el que desapareció.

Antes hemos atestiguado el suicidio de Michael Kahnwald (Sebastian Rudolph), que ha provocado en su hijo Jonás (Louis Hofmann) una andanada de inquietantes pesadillas.

Dark tiene como seña de identidad su fabulosa y compleja trama, un verdadero rompecabezas de historias entrecruzadas entre personajes del presente y de dos distintos pasados.

Para el mundo de las series esto no es novedad. Por buscar antecedentes célebres, el de Lost podía ser un buen ejemplo de viajes en el tiempo. El fantasma, o más bien el trauma (a juzgar por la pésima andadura final de aquella exitosa serie) sobrevuela en los espectadores al asistir a la historia que se despliega ante los ojos en Dark.

Y esto porque la serie de sucesos parece hacer estallar un misterio tras otro, con la consecuente intriga que atrapa y perturba a cada momento.

Sin embargo, y sin ánimo de adelantar la trama (o caer en el spoiler, según terminología inglesa “al uso”), por suerte Dark evita el derrape, aunque esto no signifique que todas las preguntas terminen respondidas.

Mientras tanto, los puntos altos son muchos. La historia, traducida a un resumen, puede no serlo tanto. Pero el logro de Dark es no tanto la originalidad de su historia como el talento para llevarla a cabo.

En este sentido, es notable, primero, el trazado de los guionistas así como el del director Baran bo Odar para ir armando ante nuestros ojos el fabuloso puzzle que tiene esta historia, repleta de momentos truculentos, de secretos muy escondidos y de intereses non sanctos.

En el haber del director también ha de anotarse cuán notablemente exprime al máximo las brillantes actuaciones de casi todo su elenco.  Es de destacar, además, el acierto de casting para personajes que persisten entre los años 1953, 1986 y 2019–.

Pero Baran bo Odar también da protagonistmo a “personajes no humanos” que toman gran relevancia en la serie, como es el caso de la cueva en el bosque (donde confluye gran parte de los misterios) de la central nuclear instalada en el pueblo y, por supuesto, el propio lugar (Winden), que alcanza una presencia cercana a la de otros célebres pueblos ficticios (Macondo o Comala, por caso).

Para quienes pedían una serie compleja, profunda, oscura y desafiante (es decir, todo lo que el juego de refritos de Stranger Things no ofrecía), Dark parece ser el producto a medida. Eso sí, que se sepa: quedarán preguntas y misterios flotando. Esa clase de preguntas atroces que tanto nos fascinan.

En detalle

Inicio. La primera temporada de Dark está compuesta por 10 episodios de 45 minutos de duración cada uno.

Comparaciones. Algunos han comparado la serie con Stranger Things, aunque pensada para un público más exigente, dada la complejidad de la trama.

Realizador. Los 10 capítulos fueron dirigidos por Baran bo Odar, cineasta suizo que realizó en 2014 el film Who Am I – Kein System ist sicher, que recibió varios premios, entre ellos el Bambi a la mejor película alemana.

Germanos. La serie se suma a una oleada de series alemanas, a las que se suman Babylon Berlin (Movistar +) y Dogs of Berlin (en Netflix en 2018).