La epidemia de obesidad que afecta al mundo entero es motivo de preocupación en el ámbito médico. La magnitud del problema llevó a la Organización Mundial de la Salud (OMS) a lanzar un alerta a la comunidad internacional.
En el marco de la 67 Asamblea Mundial de la Salud, la directora General, Margaret Chan, lamentó las altas cifras de obesidad e instó a crear una comisión de alto nivel para combatir esta crisis sanitaria, concentrándose particularmente en la situación de los niños.
Es en este contexto que hay que enfocar la llegada al país de drogas que colaboran en su tratamiento, que si bien estaban disponibles en el exterior desde hace décadas, no lo estaban a nivel local.
Si bien algunos de estos productos han sido cuestionados anteriormente por sus efectos secundarios, la problemática adquiere un tono que requiere apelar a todas las herramientas posibles para enfrentarla, aunque la fundamental e indispensable sea la adquisición de buenos hábitos alimentarios y la actividad física. La novedad fue presentada en el último Congreso Internacional de Cirugía Bariátrica que se realizó en mayo en Mendoza donde se aseguró la comprobada eficacia y seguridad de estos compuestos.
"La mayoría de los pacientes no adhiere a la totalidad de las recomendaciones médicas y es en este sentido que adquiere importancia el soporte de los medicamentos", dijo el doctor mexicano Raúl Morín, presidente fundador de la Academia Mexicana para el Estudio de la Obesidad (AMEO). "Hay acuerdo entre los médicos en que con lo que cuentan hasta ahora no ha sido suficiente".
En tanto, el especialista en Trastornos Alimentarios y Obesidad Ricardo Olmedo explicó que "la OMS ha pedido con urgencia que los laboratorios trabajen en ayuda para bajar de peso; estas epidemias están matando a la humanidad como si fueran virus". Por eso se acude al rescate de estos fármacos que están aprobados desde hace años.
Comer da al cerebro liberación de dopamina, es placentero, tienta, es una recompensa. A veces esa liberación es tan alta que no basta solo con la voluntad; ante esto un fármaco es una ayuda para la voluntad, expresó Olmedo. "No debe ser tan fácil bajar de peso si la mitad de la humanidad está excedida", destacó y agregó que un peso corporal adecuado es un requisito para una buena vejez.
Colaboran con los hábitos
Morín explicó que su función es inhibir el hambre de manera tal de facilitar el cumplimiento del plan alimentario, el cual es indispensable junto a la adquisición de nuevos hábitos saludables entre los que hay que incluir la actividad física sin los cuales los medicamentos por sí solos no son suficientes.
"El médico decidirá en qué casos estos programas necesitan un complemento con medicación: generalmente la ayuda farmacológica está indicada para aquellos pacientes con un Índice de Masa Corporal (IMC) igual o superior a 30", agregó. Es que cuando el fármaco se deja a libre demanda lo más común es que haya abuso y mal uso.
El IMC se obtiene al dividir el peso en kilos sobre la estatura en metros al cuadrado. Se considera 'normal' cuando este valor es de entre 19,5 y 24,9 kg/m2. Por debajo de 19,5, se considera 'peso bajo', por encima de 25, representa sobrepeso (25 a 29,9) y a partir de 30, obesidad en sus distintos grados.
El profesional mexicano explicó que si se sigue esta indicación sólo 1% de la población llegaría a la cirugía bariátrica y enumeró que las sales mazindol, dietil propion y fentermina serán las que llegarán a la Argentina. Estarán disponibles a partir del segundo semestre de este año, cada una con indicaciones particulares.
La empresa farmacéutica elaboradora es Medix de origen mexicano, que desarrolla, produce y comercializa medicamentos orientados especialmente al combate del sobrepeso y obesidad. Llegó a la Argentina a través de su brazo local, Produmedix y recientemente adquirió una planta en Buenos Aires, desde donde planea producir localmente.
Incidencia en aumento
La Encuesta Nacional de Factores de Riesgo 2009, publicada en 2011 y la última disponible determinó que 18% de los argentinos padece obesidad, lo cual afecta levemente más a los varones y proporción que muestra una tendencia creciente. La región de Cuyo arrojó uno de los indicadores más elevados del país: 19,4% mientras que en Mendoza se registró 20,7% de la población total afectada. En la provincia, 41,8% de los varones presenta sobrepeso y 21,5% obesidad, en tanto 29,3% de las mujeres se encuentran en la primera condición y 20% en la segunda.
Morín dijo que a grandes rasgos la mitad de la población argentina se encuentra en esta situación y destaca que la OMS la define como una enfermedad mortal.
Entre las conclusiones de la encuesta se señala que el sobrepeso explica el 58% de la ocurrencia de diabetes, el 21% de la enfermedad coronaria y entre 8 a 42% de diversos cánceres, mientras que se presenta asociada también a otras enfermedades no transmisibles, principales causas de muerte en el país.
En la infancia las condiciones no son mejores. Según datos del Programa Nacional de Sanidad Escolar (Prosane) del Ministerio de Salud que evalúa a niños de primer y sexto grado, 17% de ellos tiene sobrepeso y 13%, obesidad.
Sin embargo Morín señaló que en su caso "el tema es diferente, la Administración Federal de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) no ha autorizado el tratamiento en obesidad infantil sino que se apunta a la educación, adecuada ingesta de alimentos, lejos de aquellos que tienen más aporte de calorías y que se desarrollen en un ambiente donde puedan realizar mejor la actividad física".
Capacitación
El Ministerio de Salud, a través del Programa Provincial de Obesidad, lanzó la Capacitación Continua 2014 de la Red Provincial de Obesidad.
En este marco se presentó la Guía de Práctica Clínica Nacional sobre Diagnóstico y Tratamiento de la obesidad en adultos que apunta a mejorar la atención de los pacientes que presentan esta enfermedad. Buscará mejorar la capacidad de atención y diagnóstico de los servicios médicos y fortalecer la prevención de los factores de riesgo.
Para concretar su aplicación recibieron una capacitación integrantes de la Red Provincial de Obesidad, la cual está conformada por efectores de diversa complejidad de centros de salud y hospitales y el Centro de Cirugía Bariátrica, que funciona en el hospital Antonio Scaravelli de Tunuyán. El programa asiste actualmente a 300 pacientes.
El mundo no deja de engordar
Ningún país del mundo ha logrado revertir las cifras de obesidad en 30 años. Así lo demostró un estudio realizado por el Instituto de Mediciones Sanitarias de la Universidad de Washington a partir de información de 188 países. El impactante dato fue el más destacado en las VXII Jornadas de Medicina Nutricional y Obesidad de Fundación Diquecito que se realizaron en Córdoba el pasado 7 de junio. Esto se atribuyó al entorno tóxico en el cual se vive, con altos niveles de estrés, pocas horas de sueño y alimentación poco saludable, entre otros componentes.
El médico Máximo Ravenna, director del Centro Terapéutico Dr. Máximo Ravenna hizo alusión a un mundo capitalista y consumista en el cual "el objetivo es que la gente coma". Dijo que los profesionales se encuentran con un paciente que "no puede solo, no puede soltar la comida", y por eso resaltó la importancia de un tratamiento interdisciplinario que pueda ser sostenido en el tiempo.