Cientos de aficionados desafiaron el gélido temporal del jueves para celebrar el 80 cumpleaños del rey del Rock and Roll Elvis Presley en Memphis, estado Tennessee, junto a la familia del fallecido ícono de la música.
Los fans de Elvis saludaron a su esposa Priscilla y a su única hija Lisa Marie, mientras cortaban la torta de ocho niveles, congelada por los -9 grados que hacía durante la ceremonia.
Los aficionados pudieron comer un pedazo de la torta en un restaurante frente a Graceland, la residencia Presley que se ha convertido en un santuario a la vida, trabajo y rico legado musical de Elvis.
"Dios mío, estoy en shock. ¡Tantos de ustedes aquí!", dijo Priscilla Presley, de 69 años, agregando que Elvis "estaría sorprendido" de que tantos fans acudieran a celebrar su cumpleaños.
"Realmente no hay otro lugar donde prefiera estar", añadió Lisa Marie, de 46 años, acompañada por sus cuatro hijos: Riley, Benjamin Keough y los gemelos Harper y Finley Lockwood.
Convertido en un ícono de la cultura pop estadounidense, Presley montó en lo alto de las listas de música rock entre las décadas de los 50' y 70', antes de su muerte en agosto de 1977 a los 42 años.
Su legado incluye 108 canciones que son parte de los 100 mejores de la música pop y 129 grabaciones entre los 200 mejores discos de la revista Billboard.
Este jueves también se subastarán objetos que pertenecían a Elvis, como su primera licencia de conducir, la chaqueta que usó en la película "Viva Las Vegas" y su primera grabación, un disco de acetato de Sun Studios en el que a sus 18 años canta "My Happiness" para su madre.
Los aficionados con bolsillos más abultados podrán participar en otra subasta de dos jets privados de Presley, exhibidos desde 1980 frente a Graceland y donde pueden permanecer sólo hasta abril, según sus propietarios.