Los flashes y los elogios siempre serán para aquella Generación Dorada, y como único representante ‘vivo’ dentro del campo de juego, Luis Fabián Scola acapara las miradas.
Nunca falta un rival que resalte esa capacidad inoxidable del gran "Luifa", como el ruso Andrei Kirilenko, gran referente de esa selección, quien sorprendido lanza, "es increíble que todos los protagonistas de esa época gloriosa de Argentina ya estén retirados y, en cambio, Luis siga brillando en un Mundial. Es una leyenda".
Es lógico que los más fervientes admiradores sean sus propios ex compañeros, como un base que dejó su huella en nuestro basquetbol: Pablo Prigioni, quien destaca al eterno Scola: "Es un ejemplo de compromiso, desde hace 20 años representa al país y no se pierde ningún torneo".
Pero ayer, el que se puso el equipo al hombro, y demostró que es de otra categoría es, sin dudas, Facundo Campazzo. Las comparaciones son odiosas, pero para los especialistas de este deporte, el base del Real Madrid es a esta Selección, lo que fue “Manu” Ginóbili a aquella histórica selección dorada. O, para los más futboleros, lo que Messi te puede dar en los momentos clave de un partido chivo.
Así lo ratifica el análisis del 'Chapu' Nocioni en su columna para Infobae, cuando asevera que "al ver los partidos de esta selección argentina de básquet creo que si Facundo Campazzo no está en la NBA es porque la NBA no es tan perfecta. Es, por lejos, un jugador NBA con todas las letras. Y el Real Madrid lo sabe, por eso lo aseguró (el conjunto español le mejoró el contrato y se lo extendió hasta 2024)".
Lo cierto es que en este duelo entre Argentina y Rusia de ayer, Facundo se hizo dueño del juego. Lo sintió. "Acá cada uno se hizo cargo de los momentos calientes cuando tuvo que hacerlo. Este es un equipo y eso está por encima de las individualidades", explicó el cordobés tras el triunfo.
La noche en la que hubo más presencia de público (6.255 personas), el ambiente era tenso. Dos grupos bien marcados dividían a los ruidosos rusos y a los argentinos. Los chinos, esta vez parecieron no volcarse hacia ninguno de los dos. Cada vez que el animador del estadio propuso un juego en el que los hinchas debían seguir la letra de una canción y cantarla, no tuvo éxito. Es que el clima del encuentro no les permitía a los fanáticos relajarse y divertirse. Ese triple de Campazzo en el cierre del primer cuarto le levantó el ánimo al apagado sector de espectadores argentinos. Y el parcial de 15-0 del equipo de Hernández, al comienzo del segundo período, los encendió definitivamente y ya estuvieron más tiempo de pie que en sus butacas.
Garino fue claro al momento de elevar el rol de Campazzo en el éxito: “Fuimos al ritmo de él. ‘Facu’ marcó el camino con su intensidad, con su entrega defensiva. Eso es lo que nos sacó adelante, pero más que nada mantener esa paciencia y poder resolverlo en la parte ofensiva fue fundamental”. En el segundo cuarto Facundo cambió el ritmo del partido totalmente. Hizo que se sacara una diferencia, que el equipo jugara bien. También es para destacar la labor de Máximo Fjellerup, ayudando mucho en la faceta defensiva, y Marcos Delía.
"Fue durísimo, creo que no fue nuestro mejor partido, tenemos que ser autocríticos. Si queremos seguir subiendo escalones como equipo, si queremos seguir subiendo de nivel, tenemos que mejorar", dijo Campazzo en diálogo con TyC Sports tras el encuentro.
Y añadió: “Ellos estuvieron muy bien también, tiraron muy bien. Hay mérito de ellos, pero tenemos que jugar mejor, podemos jugar mejor”.
Para el base, Argentina fue "inteligente" porque hizo una buena defensa y evitó que los rusos tirasen triples sin resistencia. Argentina se llevó de Wuhan no solo tres victorias sino también la sensación de que puede plantarse ante equipos de distintas características y alto nivel. Y saber que el sistema de competencia lo acerca a cuartos de final con este 69-61.
Scola lo tuvo muy en cuenta: “Antes, pasar de ronda primero era saber que te tocaba un cruce mejor o peor, en cambio ahora es definitivamente mejor porque es pasar al siguiente grupo con un triunfo más con todo lo que eso vale”.
El ritmo vertiginoso del Mundial no se detiene. Y, tras viajar a Foshan, Argentina ya tiene en mente a sus próximos rivales, Venezuela y Polonia. Así los analizó Campazzo: "Serán dos desafíos grandes. A Venezuela lo conocemos mucho y ellos también a nosotros, así que va a ser durísimo. Sabemos que Polonia es similar a Rusia, aunque no los hemos enfrentado".