No está siendo la mejor semana para Lewis Hamilton, que ha tenido roces y palabras altisonantes con casi todo el que se ha cruzado junto a él. La cosa arrancó el domingo pasado en Malasia, tras la tercera rotura de motor del año, que al tricampeón lo hundió cuando tenía la victoria y el liderazgo al alcance de la mano.
"Parece que alguien no quiere que gane. Necesito explicaciones porque el título va en una dirección y no hay nada que yo pueda hacer", dijo delante de las televisiones echando una ojeada a la clasificación y los 23 puntos que ahora tiene de desventaja.
Aunque luego se desdijo, no es la primera vez que choca contra Mercedes este año. El cambio de ingenieros (los suyos pasaron al equipo de Nico Rosberg esta temporada) también le disgustó.
El equipo alemán evitó entrar en conflicto con sus estrella pese a que los tomó por sorpresa la erupción de su piloto, pero subrayó la ridiculez de hablar de sabotaje.
Lewis dio la sorpresa -reconocieron no saber nada- cuando trasladó su mal humor a la prensa internacional a quienes dejó "plantados" tras la calificación, sin aceptar preguntas. "Probablemente quien ríe el último ríe mejor. No estoy aquí para responder a sus preguntas, así lo he decidido", dijo.
La cosa venía desde el jueves, cuando dedicó la rueda de prensa oficial de la FIA a hacerse fotos modificadas con dibujos, involucrando a Carlos Sainz -al que disfrazó de zorro y de conejo-, compartiéndolas con sus redes sociales y el resto de pilotos, y en general, algo ajeno a las preguntas de los medios. Varios de ellos se lo tomaron como una falta de respeto -los pilotos no tanto- y las críticas fueron duras en algunos casos.
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Lewis lo explicó criticando -también- el formato de las ruedas de prensa de la FIA."Llevamos haciendo lo mismo 10 años".
"Hay medios que a menudo aprovechan ciertas cosas. El otro día fue un comportamiento alegre y se dijo que yo les había faltado el respeto y, sinceramente, no era la intención, sólo trataba de divertirme", soltó Hamilton.
"Pero lo que sí fue una falta de respeto es lo que se escribió en todo el mundo y realmente no tengo en mente acudir más veces a actos como éste". Bajó el micrófono y se marchó.