"Si la negociación con el FMI no resulta, algo que hoy es lo más probable, Argentina podría decidir reestructurar de manera unilateral la deuda, sin entrar en un default de la deuda. Pero mientras tanto, en las próximas semanas podría haber recuperos de precios, principalmente en la plaza del AY24D y AO20D", advierte un informe de Bull Market Brokers (BMB).
"Argentina sí o sí necesita en el próximo viaje a Washington llegar a un acuerdo con el FMI, y esto no puede ser la hoja de ruta que tiene Guzmán que requiere de un esfuerzo fiscal que no se hará con el gasto sino con "crecimiento" y aumento de impuestos. El FMI pondrá reparos a esta situación en el próximo trimestre, y con esto los mercados de deuda podrían volver a resentirse pese al anuncio de reestructuración", dice el paper de BMB.
Matias Roig, director de PPI, sostiene que una postergación de dos años en el pago de intereses y capital, más extensión de cinco años del plazo, implicarían para el Bonar 2020 sólo una quita del 27%, y en consecuencia, un upside potencial del 100% respecto al valor de hoy. En el caso del AY24, la mejora sería del orden del 67%. "En sí, las posibilidades son múltiples, pero de tomar forma una propuesta parecida a la que hoy se habla (e incluso un poco más dura) implicaría que hay valor hoy en la curva de deuda. Igual, es claro que el riesgo es alto", dijo.
Desde Allaria destacan que el mercado está expectante a cómo se encara la reestructuración de la deuda soberana en los próximos días, teniendo en cuenta los inminentes vencimientos de intereses y de capital en el caso de las letras recientemente reperfiladas: "Generar confianza en un corto plazo de tiempo será clave para lograr estabilidad. Una pronta y razonable restructuración es fundamental para poder volver a recrear un mercado de deuda que al menos permita refinanciar pasivos a los privados".
Considerando para la deuda un alargamiento de plazos y baja de cupón los primeros años, desde Allaria proyectan más potencial de suba en acciones que en bonos: "En particular, en el mercado de renta variable, el mayor potencial lo vemos en servicios públicos y en bancos, dos sectores en donde los inversores se muestran temerosos ante un posible incremento de la regulación estatal".
En renta fija, prefieren bonos en dólares con legislación local cotizando en torno a 35% de paridad, y con legislación extranjera en torno a 40%.
En acciones, seleccionan aquellas de servicios públicos, como los casos de Transener y TGN, y en segundo lugar a TGS (las tarifas del sector transporte tienen poca incidencia sobre el consumidor final); entre las generadoras preferimos a Pampa Energía (dada la suba de Central Puerto en el último mes).
En bancos, en primer lugar a BBVA, y están indistintos entre Macro, Galicia y Supervielle (ya que Macro tuvo una mejor performance que el resto el mes pasado). "En materiales, volvemos a estar indiferentes entre Loma Negra y Ternium Argentina. En real estate, volvemos a preferir a IRSA (ya que Cresud tuvo una suba mayor). En alimentos, San Miguel y Molinos Agro", dice Christian Reos, gerente de Research de Allaria.