Un ex policía mató de un disparo en la cabeza a un ladrón que intentó robar en una estación de servicio de Guaymallén. El antes uniformado y actualmente bombista forcejeó con la víctima fatal, situación en la cual se disparó un arma de fuego. Las principales dudas del caso van desde a quién le pertenecía el arma hasta cómo se produjo la pelea.
La víctima, Carlos Vázquez (20), y Nelson Moreno (47), un policía devenido empleado de la estación de servicio ubicada en Acceso Este y Tirasso, se enfrentaron cerca de las 23.30 del martes.
Según fuentes policiales, dos sujetos a bordo de una moto llegaron a la Red Mercosur, donde había un cliente y algunos trabajadores. Los motociclistas iban con la clara intención de robar en el comercio, aseguraron fuentes consultadas por Los Andes.
"El cliente estaba saliendo del baño cuando vio al sujeto que se quedó arriba de la moto con un arma en la mano", relató un investigador. Asustado, el hombre buscó refugio y a los pocos segundos escuchó la detonación de un arma de fuego.
Según lo que hasta el momento figura en el expediente, Vázquez y Moreno se trenzaron en un forcejeo que terminó cuando se disparó un revólver calibre 22. La bala fue a dar a la sien derecha de Vázquez, que murió mientras su cómplice escapaba a bordo de la moto.
En la mecánica del hecho es donde radican las mayores dudas: primero, no hay certezas de que el arma haya pertenecido al ladrón, aunque tampoco se le puede endilgar la propiedad al bombista; "no está claro de quién es", dijeron.
Otra inquietud es la manera en que la víctima terminó muerta: Científica señaló que el disparo fue "a quemarropa". Esto sumado a que una sien es un lugar muy poco frecuente para que vaya a parar una bala durante un enfrentamiento cuerpo a cuerpo.
Otro problema es que en la estación de servicio hay cámaras, pero justo en el momento en que ocurrió el hecho no filmaban hacia el lugar de la riña, por lo que no se tienen imágenes del forcejeo ni del momento del robo y mucho menos del sujeto que logró huir.
Una batería de pericias
Anoche el fiscal Tomás Guevara esperaba los resultados de varias pericias que ordenó, como el análisis de la ropa del ex policía y del sujeto muerto y de la prueba del guantelete que se le realizó a ambos. Además esperaba los resultados de Científica y de expertos en balística para encontrar una respuesta al inusual trayecto que hizo la bala, que quedó alojada en la cabeza de Vázquez.
"Hay que ver si ese plomo se puede cotejar para compararlo con las municiones del revólver que fue encontrado en el lugar", agregó la fuente consultada, que agregó: "Por el momento estamos tratando de ver cómo ocurrieron los hechos".
Igualmente el fiscal ya caratuló el hecho como robo agravado por el uso de arma apta (teniendo en cuenta que del revólver hallado salió la bala) y sacará compulsa por homicidio simple agravado por el uso de arma de fuego. Aunque esta carátula podría cambiar apenas se tengan los primeros resultados de los expertos.
Si bien el bombista no quedó detenido, se le consultó si quería dar una declaración informativa (que es la intermedia entre ser testigo o víctima o ser acusado) y se negó.
Tras el hecho, llegaron a las inmediaciones de la estación de servicio varios allegados a la víctima fatal, que, dijeron fuentes consultadas, tenía antecedentes policiales.
