La Policía Federal (PF) de Brasil detuvo al ex gobernador de Río de Janeiro Sergio Cabral (2007-2014), uno de los dirigentes más importantes del Partido del Movimiento de la Democracia Brasileña (PMDB) del presidente Michel Temer, como cabecilla de una “organización criminal” que desvió decenas de millones de dólares de obras públicas, entre ellas la reforma del estadio Maracaná.
La operación se llevó a cabo en un marco de protestas de funcionarios de Río contra los proyectos de recortes presentados por el actual gobierno, para tapar un rojo fiscal que quebró al segundo Estado más rico y más poblado del país. La víspera, otro ex gobernador, Anthony Garotinho (1999-2002), fue detenido por supuesto fraude electoral en los comicios municipales del mes pasado.
Unos 230 agentes realizaron desde las primeras horas de ayer 38 procedimientos, incluyendo 8 órdenes de prisión preventiva, entre ellas las de Cabral, y dos de prisión temporaria, precisaron la PF y el Ministerio Público Federal.
La operación deriva de la investigación Lava Jato (Lavadero de autos), que desde 2014 llevó a la cárcel a decenas de empresarios y políticos por su implicación en una red de sobornos que fraguaba licitaciones en la estatal Petrobras.
“Las investigaciones apuntan a la práctica de corrupción en la contratación de diversas obras llevadas a cabo durante el gobierno de Sergio Cabral, entre ellas la reforma del Maracaná para acoger la Copa del Mundo de 2014”, así como un programa de urbanización de favelas (PAC Favelas) y el Arco Metropolitano, una autopista inconclusa, precisó el MPF.
Las principales constructoras implicadas son Andrade Gutiérrez y Carioca Engenhieria, que “habrían efectuado pagos de valores solicitados como sobornos por un monto provisoriamente estimado en 224 millones de reales” (unos u$s 66 millones), señala el organismo en un comunicado.
“Los integrantes de la organización criminal de Sergio Cabral se apoderaron y lavaron una fortuna inmensa, que incluyó la compra de bienes de lujo, así como la prestación de servicios por parte de consultoras ficticias” entre 2007 y 2014, agrega.
“Cabral recibió, entre 2007 y 2011, al menos 2,7 millones de reales de la constructora Andrade Gutierrez, mediante entregas de dinero en efectivo”, precisa. La esposa de Cabral, Adriana Ancelmo, forma parte de las personas conducidas para interrogación.
Las investigaciones se llevaron a cabo en coordinación con las autoridades de Curitiba, donde opera el juez Sergio Moro, a cargo de las pesquisas del Lava Jato que no implican a personas con fuero privilegiado (ministros y legisladores).
Los expedientes de estos últimos están en manos de la corte suprema.
La ultra derecha exigió un golpe militar
Un grupo de manifestantes irrumpió en el plenario de la Cámara de Diputados en Brasilia para exigir una “intervención militar”.
Los activistas de extrema derecha tomaron por sorpresa al personal de seguridad y rompieron una puerta de vidrio antes de invadir momentáneamente el hemiciclo, que estaba prácticamente vacío.