La presidenta Cristina Kirchner pasó las horas previas a su operación acompañada de su entorno más íntimo. Máximo Kirchner fue el responsable de supervisar cada detalle en la Clínica Favaloro. Fue el último en irse la noche anterior y antes de las 07:30 ya estaba nuevamente junto a su madre.
"Florencia durmió acá", indicaron fuentes allegadas a la familia, la hija menor de la Presidenta no se alejó ni un instante de al lado de su madre. "Es de los únicos que no desconfío" había confesado la jefa de Estado en la entrevista realizada por Jorge Rial, refiriéndose a sus hijos. Ayer también estuvo acompañando Rocío García, la nuera de Cristina quien fue mamá hace unos meses de Néstor Iván.
Sus familiares esperaron la finalización de la operación en la habitación donde la Presidenta pasó la noche, ubicada en el noveno piso de la Clínica y donde se recupera por estas horas.
Después de la intervención quirúgica, se realizó la lectura del comunicado que llevó la firma del jefe del Instituto de Neurociencia de Favaloro, Facundo Manes, y del director médico del centro, Gerardo Bozovich. A las dos de la tarde comenzó el movimiento de vehículos polarizados en el estacionamiento sobre la calle Venezuela donde la prensa y un grupo de militantes realizaron la guardia durante todo el día.
Entre las primeras en retirarse se observó a la minsitra de Desarrollo Social Alicia Kirchner y cuñada de la Presidenta, que la acompañó desde el sábado a la tarde cuando ingresó a la clínica por primera vez. Giselle Fernández, hermana de la Jefa de Estado también permaneció hasta unas horas después de finalizada la cirugía en la clínica y se retiró pocos minutos después de Alicia y Máximo Kirchner.
Su madre y muy pocos funcionarios
Una de las últimas en retirarse y también por el acceso sobre calle Venezuela, fue Ofelia Wilhelm, la madre de Cristina que la acompañó gran parte del día previo a la cirugía e ingresó temprano a la Fundación Favaloro antes de que la Presidenta ingrese al quirófano y fue de las últimas en retirarse transcurridas las tres y media de la tarde, en un auto Hiunday color verde y escoltado por la custodia presidencial.
De los funcionarios sólo pudieron visitar a la Presidenta parte del entorno de mayor confianza. Se retiraron después de las dos de la tarde el vocero Alfredo Soccimarro y Oscar Parrilli secretario general de la Presidencia. Fuentes oficiales confirmaron que no estaba previsto que en el primer día después de la operación, la Jefa de Estado recibiera visitas de funcionarios del su gabinete.
