Algunos de ellos -no todos, vale aclarar- tuvieron sus 5 minutos de fama luego de que el pasado 21 de junio fueran identificados como los autores de pintadas y graffitis en la Plaza Chile, en pleno centro mendocino.
Se trata de un grupo de alumnos del Colegio María Auxiliadora (ubicado en calle 25 de mayo y Las Heras, a la vuelta del espacio verde), quienes cosecharon todo tipo de críticas por estos actos vandálicos que pretendían ser una de tantas travesuras de adolescentes.
De la misma manera en que fueron criticados en aquel momento -incluso el propio intendente de Ciudad, Rodolfo Suárez hizo público su malestar-, lo que están haciendo por estos días también merece ser reconocido: luego de pedir disculpas públicas oportunamente y de limpiar las pintadas de su autoría, desde ayer y durante toda la semana los chicos colaborarán restaurando monumentos públicos de otro espacio verde capitalino, la Plaza Italia.
Con remeras de la Municipalidad, máscaras y trabajando meticulosamente en equipo. Así se los pudo observar a los estudiantes durante la mañana de ayer, junto a un equipo de restauradoras de la Municipalidad de la Ciudad de Mendoza, removiendo las pintadas que se encuentran en el monumento principal de la plaza y que no son precisamente las que hicieron ellos hace un mes. Hasta el propio Suárez pasó a saludarlos y felicitarlos por la iniciativa en su primer día de trabajo.
"Al grupo en el que estoy yo nos tocó venir hoy (por ayer). Es una experiencia diferente y la estamos disfrutando un montón, y aprendiendo. Quisimos ofrecernos a hacer algo más, y no quedarnos solamente en pedir perdón y listo. Además nos enseñan y explican qué significa cada obra" resumió con simpatía Abril, una de las chicas de quinto año del establecimiento al finalizar la primera jornada.
“Los chicos han vivido toda la experiencia del limpiado, el pulido y de comprar el material. Es parte de todo un proyecto institucional e interdisciplinario de restauración de monumentos. Consiste en formar brigadas de alumnos para cuidar el espacio público y los monumentos”, resumió a su turno la representante legal y directora del María Auxiliadora, Mónica Flotts.
Manos a la obra
En total son 65 los alumnos de quinto año del establecimiento educativo que desde ayer y hasta el viernes colaborarán con la restauración.
"Se trata de monumentos que están grafiteados desde hace años. Y los chicos están muy entusiasmados, con una actitud muy madura y muy adulta. Porque además también les ha permitido ponerse en contacto con la historia de la Ciudad y de las plazas después del terremoto de 1861. Les da más sentido de pertenencia", resumió Flotts.
Pasadas las 10 los chicos comenzaron a reunirse entre la fuente y el monumento principal de la Plaza Italia y, tras recibir algunas indicaciones, pusieron manos a la obra. Y así continuaron hasta pasado el mediodía de ayer, puliendo y repasando con cepillos y otros instrumentos especiales.
“Quizás esto pueda servir para sumar más jóvenes voluntarios, ya que esta es una experiencia piloto y puede ir contagiando”, agregó la representante legal de la escuela.
“Lo primero que hicimos fue escuchar toda la explicación sobre el uso de materiales para saber qué y cómo teníamos que hacerlo. La verdad es que le recomendaría a otros chicos que se sumen y participen. Es una forma de aportar, aprender y saber que lo que hicimos (en alusión a las pintadas en Plaza Chile) no queda en nada”, cerró Abril.
“No es un castigo, es una toma de conciencia en los chicos”, acotó Flotts.
Aprovechando la presencia de especialistas de la comuna, los chicos recibieron además una clase de historia sobre el monumento y una vez terminadas las tareas de restauración deberán preparar un informe para presentarlo a sus docentes.