Estudiantes cayó 1-0 ante Independiente del Valle de Ecuador, en el duelo de ida de uno de los repechajes de la Copa Libertadores de América, que se disputó en el estadio General Rumiñahui de la ciudad de Sangolquí, ubicada a 32 kilómetros de Quito y 2.500 metros sobre el nivel del mar.
El objetivo del Pincha, no perder, se vio claro desde el arranque. La principal herramienta para conseguirlo fue un férreo abroquelamiento en su campo.
Así, en los 45 minutos iniciales los arcos fueron meros elementos decorativos en el campo de juego. La chatura del primer capítulo no se vio alterada en el segundo período.
El camino hacia el cero parecía no tener obstáculos. Sin embargo, a los 34 minutos Mario Pineida recogió un balón contra la banda izquierda, se animó, enganchó hacia el centro, desairó a Ezequiel Cerutti y despachó con su pie derecho un misil cruzado que se clavó contra un palo e hizo estéril el vuelo de Navarro, para dar forma al 1-0 definitivo.
La llave se resolverá el jueves próximo, a partir de las 21.45, en La Plata. Estudiantes deberá ganar para avanzar, mientras que una igualdad sin goles llevará la definición a los tiros desde el punto del penal.
