Estrés: una respuesta desde la osteopatía

Te acercamos las respuestas de la osteopatía en la eliminación del estrés.

Estrés: una respuesta desde la osteopatía

¿Te sentís estresado? ¿Te cuesta bajar un cambio? ¿Sufrís insom­nio, falta de memoria, problemas hormonales? ¿Sentís que tu vida está muy desequlibrada? ¿Sentis miedo en forma permanente? ¿Tus emociones están a flor de piel? Probá con osteopatía.

Todas estas funciones y muchas más dependen de diferentes es­tructuras cerebrales. La osteopatía puede evaluar estos centros ce­rebrales y equilibrarlos. Podemos decir que el cerebro está formado por tres cerebros: el reptiliano, el límbico y el neocortex en orden de evolución. Los tres están interconectados.

El cerebro reptiliano tiene como función regular funciones fisioló­gicas involuntarias por ejemplo el hambre, la sed, y la respiración. Este cerebro no piensa ni tiene emociones.

El cerebro límbico es el almacén de nuestras emociones y recuerdos (la amígdala es la base de la memoria afectiva. ¿Sentís miedo, rabia, celos, tus relaciones sociales no son buenas? Estos síntomas están presentes en la disfunción del sistema límbico.

Al cuerpo se lo puede ver como un receptor de estímulos. Continua­mente estamos recibiendo distintos tipos de información; desde una noticia a través de nuestra note­book, hasta la orden de un jefe verbal­mente. Mucha de esta informa­ción es guardada en nuestro cuerpo como una emoción no manifiesta, formando un quiste de energía.

Los quistes energéticos pue­den estar retenidos en nues­tras extremidades mediante las restricciones miofascia­les (popularmente llamada contractura). Es decir que las restricciones miofas­ciales aparecen tanto por el mal uso del cuerpo, como también si retene­mos nuestras emociones no expresadas en el tejido (vísce­ras, músculos, etc).

El cerebro racional o neocortex: es el que toma conciencia, trata de controlar las emociones (aunque las emociones tiene una vía neural más rápida que el neocortex) y desarrolla las capacidades cognitivas (memoriza­ción, concentración, autorreflexión, resolución de problemas).

Parte de la responsabilidad del estado integral de salud recae sobre la amígdala (cerebro límbico, inconciente) y esta condiciona nuestra salud física (cerebro reptiliano, inconciente) y nuestros pensamien­tos y estados de conciencia (cerebro racional, conciente).

Es decir cuando tenemos miedo, stress las amígdalas están en dis­función. Para equilibrarlas hay técnicas funcionales osteopáticas.

Cuando tenemos alteraciones en el sueño (insomnio, despertarse temprano, entre otras) la glándula pineal está en disfunción. A veces la glándula pineal esta como dormida y a pesar de que estemos en la oscuridad no secreta melatonina para conciliar el sueño. La osteo­patía puede estimularla y equilibrar el ciclo sueño-vigilia.

¿Sentís que tu memoria no es la misma de siempre? ¿Te cuesta re­tener información? La memoria está condicionada por la función del fornix y del hipocampo. Éstas se pueden estimular manualmente y ser complementaria a otras terapias.

¿Tenés problemas hormonales? ¿Tus ciclos menstruales son regu­lares? ¿Te sentís hinchado con alteración del sueño y del hambre y todos los análisis clínicos te dan normales? Los problemas hormo­nales están condicionados por el hipotálamo. Este tiene diferentes partes y cada una secreta hormonas diferentes. Estas hormonas sirven de estímulo para que la hipófisis secrete la hormonal final. Si te hicieron estudios y no tenés problemas estructurales del hi­potálamo o de la hipófisis (por ejemplo un quiste) estamos ante un problema funcional. Los médicos lo diagnostican como es­trés. Éste es el momento oportu­no para recurrir a la ayuda de un osteópata.

¿Te sentís apático, sin alegría? Un núcleo del cerebro está inhibido, éste se llama glo­bo pálido. Con un tratamiento ade­cuado se pueden modificar algunos estados de ánimo.

Hay un núcleo lla­mado acumbens que está relacio­nado con el placer. Éste está relacionado con la droga­dicción, la obesidad, el deseo se­xual, entre otras cosas. Se puede diagnosticar su estado y tratarlo ma­nualmente.

Conclusión: Siempre que los estudios te den normales y vos sientas todos estos síntomas o estés estresado, el osteópata es una opción para mejorar tu salud.

Lic. en Kinesiología Mat. Nº 698. Kinesiología - Osteopatía - Ergonomía. 154179143 - 2613069258 - 9 de Julio 1215 1º P. Mendoza. Facebook:

Valeria Ochoa Licenciada en Kinesiologia

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www.valeriaochoa.com

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