El hockey sobre patines de Mendoza ayer vivió una jornada histórica. No sólo por la segunda estrella, que en la categoría senior femenino, conquistó Andes Talleres, sino porque dos elencos locales fueron protagonistas de una final inolvidable. En el marcador, las Azulgrana trazaron una diferencia de 3 a 0. En la pista, a un año de su nacimiento, Leonardo Murialdo expuso -además de su juego de circulación- la dignidad como principal estandarte.
Sin embargo la mayor recompensa se la llevó el público que llenó las gradas del flamantes estadio Juan Giol. A lo largo del partido, Andes Talleres ganó el encuentro en todos los terrenos. El elenco Azulgrana, dirigido por Ariel Moreno, presionó en toda la pista e impuso una barrera psicológica como sexto hombre.
El despliegue de Julieta Fernández, que parecía multiplicarse en la defensa y apostó la bola limpia para el eventual contragolpe fue uno de los puntos más altos del campeón. El Azulgrana había dividido sus fuerzas, en dos bloques, para dominar el terreno.
Lo que fueron insinuaciones de fuerza, a los 10'21" se convirtieron en realidad. Agustina Fernández logra burlar los reflejos de Flavia Blasco para quebrar el marcador. Con la ventaja mínima, el Matador no deja de ejercer presión y Murialdo se carga de faltas de equipo.
Allí comenzó el trabajo de orfebre, hilvanar cada eslabón transformando la pista en un callejón sin salida para las chicas de calle Bandera de los Andes. Peso el oficio del grupo, de los años de juego en conjunto. Mientras que Murialdo seguía cimentando las bases para un futuro muy prometedor. Por el bronce, UVT venció a Maipú/Giol (3 a 2) por penales.
Con "estrellas” Azulgrana
En la primera final mendocina, Andes Talleres venció a Murialdo (3 a 0) y se proclamó campeón.
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