Soledad Pastorutti hizo vibrar este fin de semana el Movistar Arena de la Ciudad de Buenos Aires en sus tres shows con entradas agotadas. Más allá de presentar los nuevos temas de su álbum “Parte de mí” y recorrer su larga batería de hits, la cantante invitó al escenario a varios exparticipantes de “La Voz Argentina”, el programa en el que este año se desempeñó como jurado.
En el primer recital del viernes, La Sole subió al escenario al ganador del ciclo, Francisco Benítez, quien la acompañó para la canción “Aunque me digas que no”. Con el cordobés, la artista de Arequito ya había compartido varios momentos en distintas presentaciones, potenciando así la visibilidad de la carrera del joven después de ganarse el cariño del público en su paso por la televisión.
Al día siguiente, Soledad sumó a su recital a Luna Suárez y Álex Freidig, dos semifinalistas de su equipo en “La Voz Argentina”. La Sole y Luna unieron su poderío vocal en “Quién dijo” -original a dúo con Kany García-, mientras que el muchacho acompañó a la artista en una zamba a piano y voz.
Ya el domingo, la intérprete de “Que nadie sepa mi sufrir” invitó a su concierto en el Movistar Arena a Patricio Mai, otro exparticipante de “La Voz Argentina”, con quien cautivó al público en una nueva versión de “Adonde vayas”, canción lanzada en 2003.
Por último, Magdalena Cullen, la querida “trovadora” del talent show, aportó su dulce voz en la balada “Quién dijo”.
En las redes sociales, tanto los exconcursantes como la propia Soledad compartieron distintas postales y algunos videos de los emotivos momentos que pasaron juntos el fin de semana.
A lo largo de dos horas de show, La Sole repasó los temas de su álbum “Parte de mí”, incluyendo los sencillos “La música de mi vida” y “Chingui chingui”, y cerró a pura fiesta con un set de chacareras, de zambas a dúo con su hermana Natalia y hasta chamamé.
En otro de los momentos destacados, el DJ Tommy Muñoz reformuló el sonido de clásicos como “El bahiano” y “Tren del cielo”, dando el broche de oro a un regreso inolvidable para una Sole que entregó una energía implacable.
